Han Jisung está cansado de su vida, de no saber quién es, de no saber qué es lo que quiere. Está cansado de su deteriorada relación con Minho y de sus amigos que solo lo recuerdan cuándo el les hablá. Han está tan cansado que solo quiere dormir y no...
Jisung despierta de nuevo, en su misma cama, en su mismo cuarto a su misma hora.
Sabe que tiene un mensaje de Minho, son las 8:00 de la mañana y como cada día de la angustiosa rutina debe enviarle un mensaje de "buenos días".
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Ese es todo el contacto que tiene con su novio por el momento, hasta la hora de la comida dónde él le preguntará sí ya comió a lo cuál Han responderá que sí.
Se siente tan agobiado por el presente que no tiene tiempo de para pensar en el futuro. Las situaciones siempre lo agobian haciendo que las cosas que solían gustarle pasen a segundo plano o que incluso ya no existan.
Baja como todos los días a la cocina de su departamento, un departamento tan grande y espacioso es mucho para él pero no importa porque el lo escogió. Pudo quedarse a vivir en Malasia o irse a otro lugar pero él escogió Seoul y escogió una vida de la que no le gusta nada.
A veces quiere empezar de nuevo, hacer lo que tanto le gusta. No quedarse estancando en una relación donde no lo quieren y que la rutina le ha ganado al amor. No tener amigos que solo lo buscan cuándo nadie más está para ellos, porque cuando Jisung lo necesita, nunca nadie está.
Quiere comenzar de nuevo en un lugar dónde el sol brille y dónde el también pueda brillar. Dónde no se vea opacado por la luz de otros, dónde no lo quieran apagar.
Quiere comenzar de nuevo, para que llegué el día en que despierte y pueda saber quién es.
