Capitulo 36

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Estaba asustada, de esto no podía salir nada bueno, justo detrás de el había llegado Lucas, dude si el nos ayudaría a salir de acá notando como estaba la situación, el simplemente me evadió, no era el chico que me llevo a comer (Y que posteriormente me había dejado sola en un restaurante el cual cuando intente escapar me encontraron -de nuevo-)


-¡Alguien ha dado la noticia de que tenemos a ''Rehenes'' aquí'' -Dijo gritando y con tono sarcástico al referirse a la palabra Rehén


Los gorilas (había empezado a llamar así a los sujetos que trabajaban para el) empezaron a acercarse corriendo hacia nosotras, primero fueron por Rebeca, luego por otra chica, antes de seguir viendo o de hacer algún movimiento para impedir que me golpearan, ya estaban encima de mi y me habían vendado, lo próximo que escuche eran gritos y personas corriendo, las sirenas ya estaban cerca


*****


Me habían tirado a un auto, no sentí gente cerca de mi así que pude deducir que nos habían metido en autos diferentes, ¿A donde iríamos ahora? ¿Saldríamos de la ciudad?


Alguien entro, era el chófer que no tardo ni un segundo en colocar el coche en Movimiento acelerando bruscamente, solo escuchábamos el aire acondicionado, el no decía ni una palabra, típico trabajador de Hernandez, llegué a pensar que era Lucas, pero era imposible.... o al menos eso creía


*****


Ya había pasado alrededor de media hora de camino, no tenia ni jodida idea de donde estábamos, ni a donde nos dirigíamos, hasta que el chófer me quito la venda, para mi suerte, el chófer era Lucas,


¡Lucas! -Dije con un tono alegre por verlo


El no me contesto, su silencio era ensordecedor, intentaba aclarar la vista y logre ver algo diferente en él, particularmente en su rostro... lo habían golpeado, tenia moretones en su cara, ¡HERNANDEZ HIJO DE...!


El no me miraba, era seguro, le habían golpeado tras lo del Restaurante


-Lucas, necesito que me digas quien y porque te hicieron eso? -Le dije preocupada, en realidad lo estaba


El siguió con su silencio, mire a los lados, ya habitamos salido de la ciudad, la cosa no estaba mejorando, estaba empeorando


-¡¿Al menos me puedes decir a donde vamos?!


Ya empezaba a agotarme, Lucas había cambiado tras recibir esos golpes, no sabia como interpretar su silencio, pero decidí jugar al mismo juego, el coche siguió camino, ya empezaba a oscurecerse, habíamos cambiado de ruta, ya no no íbamos a la ciudad, nos dirigíamos al campo, ¿Hernandez tenia bunquer en el campo? Ya no me impresionaba nada de este tío...


Se hacia de noche, Lucas bajo la velocidad, algo me decía que estábamos llegando, lo confirme cuando mas adelante estaba un guardia que nos dejo pasar, definitivamente Hernandez tenia gorilas en todos lados (y eso me aterraba), al llegar era un conjunto de casas, ya habían llegado los demás vehículos, para este momento Lucas rompió su silencio


-Hasta aquí puedes ver, ya te permití demasiado


Y sin darme tiempo de responder, me amordazo y me vendo nuevamente, ya no sabía que me podía esperar en este lugar, aunque viniendo de Hernandez Sabia que era lo peor

Mi nombre es JanetDonde viven las historias. Descúbrelo ahora