El sabor de tus mentiras

Capitulo 6

Pov's Lizzie

Hoy se cumple una semana desde la estupidez que cometí en nuestra cita, una semana en la que trate de llamarla en varias ocasiones pero simplemente no tengo el valor de hablar con ella. Una semana en la que he soñado y pensado sus suaves labios sobre los mios, pero al mismo tiempo la misma pesadilla de no saber nada de ella.

Se que ya no esta hospedandose en el hotel, lo sé porque me lo comentó el día que nos vimos en el parque

-Doctora Elizabeth- Escucho que tocan la puerta de mi consultorio

-¿Si?

-Tenemos cirugía en unos minutos.

Siento como mi cuerpo me pide a gritos una larga siesta, sin duda la mejor opcion para olvidarse por un momento de los problemas es sumergirse en el trabajo y hace una semana que lo estoy haciendo. En toda la semana no he ido a mi departamento, solo fui por una pequeña maleta con ropa y a pedirle a la señora Hart que me cuidara a Sparky.

-En un momento voy.

Terminó de estudiar el caso de la pequeña Aria, por fin de ocho largos meses de espera va recibir de nuevo el transplante de corazon

Aria Alexiou, cinco años de edad diagnosticada con Cardiopatia congenita, es su segundo transplante, ya que su anterior transplante de corazón fue un total fracaso.

Aún recuerdo la primera vez que conocí a la pequeña Aria

Flashback:

Me encontraba sentada descansando de un largo día de trabajo cuando siento como una pequeña pelota de goma golpea mi pie y a lo lejos logro ver a una niña escondida entre las paredes de los pasillos del hospital

Veo que viste un lindo vestido rosa con pequeñas flores adornando la parte de enfrente y unos lindos zapatos blancos. Logro ver cómo mira la pequeña pelota que está sobre mis pies y no dudo en agarrar la pequeña pelota.

-Hola. Saludo mirando a la pequeña niña escondida. -Me imagino esta linda pelota es tuya? Pregunto mirando a la niña

-Si. Responde en voz baja. Le dedico una pequeña sonrisa.

-Ven. La llamo pero veo niega con su cabezita

-No, porque no?

-Eles mala, tolos aquí son mallos. Responde y logró ver el miedo en sus ojos

-No, no soy mala.

-Shi, eles mala.

-Porque dices que soy mala? Pregunto poniendome de rodillas para estar a la altura de la pequeña. Y veo como me señala con sus pequeños dedos

-Que pasa. Pregunto con curiosidad

-Tu tlaje es malo. Escucho como dice señalando mi bata. Con que es eso, comienzo a quitarme la bata y la dejo el asiento donde me encontraba

-Ves que no soy mala. Digo y veo como sale de su escondite. -Ven, quieres un dulce? Pregunto sacando una paleta de bata. Comienza a acercarse a paso tímido hasta que está a solo unos metro de mi, veo que cuenta con unos lindos ojos azules y su cabello es color castaño claro

-Toma, te la regalo. Digo ofreciéndole la paleta. Su pequeña mano agarra la paleta con miedo y no dudo en soltar una pequeña risa

-Glatias, pelo yo no tengo nala que regalate.

-No es necesario pequeña, aunque me podrías decir cómo te llamas.

-Me llamo Aria y tengo cinco años