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Mis ojos sentía molestia por la luz, no tenia idea de donde estaba, pero algo me decia que era un lugar muy iluminado. Lentamente abrió los ojos y mire mi alrededor, cuando termine de escanear la habitacion una palabra se me vino a la mente.
- ¿Un hospital?
Con cuidado me incorpore para poder sentarme en la cama, todo el cuerpo me dolía así que lo hice con mucho cuidado, cuando logre sentarme alguien abrió la puerta, ese alguien era mi papá.
- Papá... - Dije suavemente.
De la impresión dejo caer el café que traía en una de sus manos y de inmediato corrió hacia mi para abrazarme con todas sus fuerzas.
- ¡Estas despierta!, por fin despiertas. - Decía entre sollozos.
Su aspecto era descuidado, por lo que deducía que llevaba al menos 2 días sin bañarse, pero no entendía como es que llego aquí, se supone que estaba en un viaje de negocios en Nueva York.
- ¿Cómo te sientes? ¿Te duele algo? ¿Tienes hambre? - Dejo de abrazarme para bombardearme con sus preguntas.
- Tengo mucha sed y me duele...
- Se lo que duele. - Suspiro - Ya estoy enterado de todo. Algo que tengas que decir a tu favor.
- Creo que no. - Agache la mirada.
- Ya que despertaste tendré mucho tiempo para regañarte, supongo que ahora tienes muchas preguntas.
- Si.
Mi padre me contó que Kaoru fue el que lo contacto, por alguna extraña razón el estaba en el hospital cuando llegue por el disparo que recibí y cuando llego al hospital el le explico todo. Además que mi madre ya le había enviado las fotos que tomo el otro día, así que ya no le podía ocultar nada.
- Supongo que estas molesto... - Dije sin mirarlo a la cara.
- Mas que eso, pero ya después pagarás las consecuencias de tus actos.
- Me enviaras a un internado con monjas.
- No, aun no se me ocurre un castigo digno de lo que has hecho.
- Entiendo...
- Por ahora solo concéntrate en recuperarte.
- Esta bien.
- Por cierto, mas te vale terminar con el y ahora no estoy jugando. Tu misma te has dado cuenta de lo que puede pasar si estas a su lado.
- Lo se.
- Tienes hasta el fin del mes, sino no has hecho para entonces pondré ordenes de restricción y lo mandaré a la cárcel.
- Sabia que dirías eso.
- Por cierto, hay dos personas que quieren verte.
Lo mire confundida, el abrió la puerta dejando entrar a Hina y Emma, esta ultima estaba usando una pijama de hospital.
- ¡Chicas! - Grite de emoción en cuanto las vi.
- ¡_______! - Exclamaron ambas mientras me abrazaba.
Sigilosamente mi padre salió de la habitación dejándome a solas con mis mejores amigas.
- ¡Creí que nunca despertarías! - Lloro Hina.
- Lamento haberlas preocupado. - Las abrace fuertemente.
- ¡No lo vuelvas a hacer!
- Lo prometo.
Nos dejamos de abrazar y de inmediato abrace a Emma; todo este tiempo había pensado que Kisaki la había matado, pero me alegraba saber que no era así.
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[¤ 𝐃𝐚𝐧𝐠𝐞𝐫𝐨𝐮𝐬 𝐥𝐨𝐯𝐞 ¤] •𝐌𝐢𝐤𝐞𝐲 𝐘 𝐓ú•
Fanfiction[ 𝐄𝐫𝐞𝐬 𝐮𝐧𝐚 𝐜𝐡𝐢𝐜𝐚 𝐝𝐞 𝐟𝐚𝐦𝐢𝐥𝐢𝐚 𝐚𝐝𝐢𝐧𝐞𝐫𝐚𝐝𝐚, 𝐞𝐥 𝐮𝐧 𝐝𝐞𝐥𝐢𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐞, 𝐬𝐨𝐧 𝐝𝐨𝐬 𝐩𝐨𝐥𝐨𝐬 𝐨𝐩𝐮𝐞𝐬𝐭𝐨𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐭𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚𝐫𝐚𝐧 𝐜𝐨𝐧𝐯𝐢𝐯𝐢𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐞𝐧 𝐮𝐧 𝐚𝐦𝐛𝐢𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐥𝐥𝐞𝐧𝐨 𝐝𝐞 𝐩𝐞𝐥𝐢𝐠...