Alexander Espinoza era un joven ejemplar de una familia de clase media de México bastante conservadora . El era alguien tranquilo y calmado hasta que un día explotó en plena reunión familiar y su fachada de buen niño se rompió cual cristal sacando todo lo que tenía guardado sobre su familia y revelando cierto detalle sobre su orientación que escandalizó a esta a tal grado de tener que escapar de casa por su seguridad.
él sabía que al soltar la bomba sobre su orientación sería un tema delicado pues él tenía muy presente el hecho de que su familia tenía opiniones muy poco agradables sobre la comunidad por no decir que la gran mayoría de su familia era homofobica y bastante machista. él había pensado decirlo en un momento donde no estuviera toda la familia pero esa idea se descarto en cuanto su tía empezó a compararlo con su hijo y sus padres le siguieran con las críticas.
realmente no le molestaba el tener que escapar de casa, más bien fue algo bueno y liberador para él. Durante sus veinte años él había vivido como un títere para su familia, siendo controlado por completo y forzado a tomar el papel de hijo perfecto solo para satisfacer a sus padres en busca de su aprobación, algo que nunca logró conseguir gracias a los estándares tan altos que sus hermanos y primos habían dejado.
El estrés cada día lo hundía más en un pozo oscuro donde la ansiedad empezaba a tomar control y la tristeza apagaba sus esperanzas de salir de ahí, él jamás creyó ser capaz de enfrentar a la bola de arpías que se hacía llamar su familia. cuan equivocado estaba, pues solo necesito un comentario mordaz sobre su persona para que su paciencia desapareciera de la faz de la tierra y la ira tomara su lugar haciendo salir el vómito verbal que llevaba tiempo retenido en su garganta.
por primera vez en su vida se sentía en completa tranquilidad consigo mismo. su cuerpo había sido rodeado por una paz que jamás había sentido y una felicidad se apoderó de él, sin importarle el hecho de que ahora se encontraba solo, sentado en la acera y en plena lluvia. una gran sonrisa se dibujó en su rostro y un grito de felicidad salió de su garganta desconcertando a las personas que pasaban a su lado, de nuevo nada le importo. él era libre, al fin podía tomar sus propias decisiones, podía amar a quien quiera sin miedo al qué dirán y al fin podía ser él mismo.
su burbuja de felicidad se vio destruida por el sonido de un trueno, haciendo que el chico saliera de su estupor y volviera a la realidad, una realidad en donde un frió glacial se impregnaba en sus huesos y su cuerpo se encontraba completamente cubierto por agua y con una posible hipotermia. rápidamente se cubrió bajo la fachada de un local abrazándose en un intento para entrar en calor obviamente sin lograrlo. la felicidad en la que estaba tan solo hace momentos no solo se opacó por el frió si no que también al recordar las últimas horas logrando captar un pequeño error.
Gracias al arrebato de emociones, ahora se encontraba sin hogar y sin ninguna de sus posesiones en plena tormenta. ¿ahora que hago? la pregunta se quedó en su mente sin ser pronunciada, no tenía ningún plan gracias a que todo surgió de imprevisto y mucho menos tenía un lugar donde quedarse, otro pensamiento surgió en su mente, ¿tal vez podría preguntarle a algún amigo? a quien engaño no tengo amigos, pero rápidamente fue descartado. se frotó el rostro maldiciendo se a sí mismo por sus nulas capacidades para socializar. sin apartar sus manos de su rostro, dio otro grito que fue amortiguado y con un significado completamente diferente al anterior pues este era de ira pura contra sí mismo, cerró los ojos un momento solo para calmarse con el sonido de la lluvia de fondo, poniendo a trabajar a su cerebro para buscar una solución a su problema.
-okey, todo estará bien alexander- se dijo a sí mismo con tono falso de calma - tienes dinero, puedes tomar un camión y pagar un hotel luego vuelves por tus cosas- dio un aplauso al aire como si se estuviera felicitando por su idea y con paso apresurado se dirigió a la parada del camión ya sin importarle mojarse, afortunadamente esta se encontraba cerca de su casa y en menos de 5 minutos ya se encontraba ahí esperando y rezando a dios para que este pasara lo más pronto posible.

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Breaking my destiny (Harco)
FanfictionCuando Alexander Espinoza muere, el espera encontrarse tal vez en el infierno o en el purgatorio, o en cualquier lugar menos en una historia que leyó en su preadolescencia y mucho menos convirtiéndose en el personaje arrogante, racista y prejuicioso...