𝐂𝐋𝐔𝐓𝐓𝐄𝐍 | ❝Venus era la rosa y Cedric la raíz que la mantenía viva.❞
Cuando Cedric conoce a Venus siente una gran conexión con ella. En un intento de cambiar su malévola actitud, se da cuenta de que aún existe humanidad en Venus, pero la chic...
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「 CAPÍTULO CUATRO 」 【CONTACTO FÍSICO】
26 de octubre de 1994.
Llegó el día del partido de Hufflepuff contra Gryffindor, puesto que el anterior partido de los tejones contra las serpientes fue reprogramado. Venus había estado observando a Cedric los días posteriores, y se le notaba nervioso e inquietante.
Dejaron de hablar tan seguido, ya que Cedric era el capitán del equipo de Hufflepuff y debía ordenar a su equipo a entrenar para ganar el equipo, pero no parecieron esforzarse tanto.
Los días en el castillo habían sido una agonía, desde que Lupin se fue, entró un nuevo profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras, Alastor Moody, se llamaba, mejor conocido como "Ojoloco".
El hombre era un Auror, pero Venus no le veía nada de bueno. Su color de pelo era rubio con canas, y tenía una melena rastrera.
Sus ojos cafés... mejor dicho ojo era café. Su otro ojo, que en paz descanse, estaba tuerto.
A nadie le caía muy bien Ojoloco, tal vez un poco Potter, pero solo porque lo defendía, cosa que hizo un día, defendiéndole de Malfoy, quien quiso atacar a Potter por la espalda.
Días antes, Venus entraba a su habitación cuando se encontró con la asquerosa imagen de Nicole y Zacharias Smith revolcándose sobre la cama de Venus, ¿y por qué en su cama?
Pues la razón era que las sábanas de Venus eran más cálidas que las de la pelirroja y morena, por eso, comenzaron a recostarse en ella, fumando, y luego terminaron con unos besitos en el cuello.
Desde ahí, Xenia y Venus investigaron sobre la posible relación de Nicole y Zacharias y, al parecer, ambos estaban en algo; tipo lío, como siempre. Nicole era una de las típicas chicas que necesitaba la atención de un chico para curar su daño psicológico, o algo así dijo su psicólogo muggle.
A ella le dio un poco igual, no le importaba que alguien influyera en sus sentimientos, y menos un "come sesos", como le decía Nicole a su terapéutico.
Por su lado, Xenia seguía molesta con Blaise por haberle visto con la chica Abbott de Hufflepuff.
Entonces, su mal humor había empeorado de lo que, anteriormente, ya lo estaba. Eso a cierta rubia le vino en grande, porque Nicole apenas las veía, ya que se fugaba con su amor platónico, y como Venus estaba más sola que la una, tenía que aguantar los berrinches de Xenia a cualquier minuto.
A veces, Venus iba al lago Negro, donde variadamente se encontraba con su tejón favorito.
Y decía favorito porque no tenía muchos amigos de Hufflepuff, como mucho Zacharias, Macmillan y Finch-Fletchley, aparte de Cedric.