His Submission (BDSM) (Larry Mpreg) Libro 1 Traducción al español

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Cuando llegó el sábado, Louis sintió que podía vomitar de nerviosismo. Necesitaba causar una buena impresión esta vez, la primera había sido tan increíblemente patética que estaba sorprendido de que Harry no le hubiera rechazado y solicitado un nuevo sumiso. Estaba vestido casualmente como Harry lo había pedido, jeans ajustados de color azul claro con un cuello en V blanco pálido que hacía alarde de sus clavículas y se ajustaba bien a él. Se puso un abrigo gris de lana prensada ya que Harry le dijo que se vistiera abrigado. En sus pies, simplemente usaba converse, ya que no sentía que ninguno de sus otros zapatos combinara decentemente con sus cosas. Solo podía esperar que a Harry le gustara lo que tenía puesto.

Esperó ansiosamente junto a la puerta principal, asomándose por la ventana de vez en cuando para ver si Harry se había detenido. Su madre miraba en silencio detrás de él, mientras intentaba calmar a Louis "Estoy segura de que va a llegar".

"No puedo volver a parecer un idiota". Louis murmuró, pero luego un mustang rubí 2014 se detuvo en la curva, y Louis farfulló con ansiedad. "Él está aquí, deséame suerte" 

"Diviértete, querido". Jay murmuró mientras Louis trataba de caminar lo más calmado y rápido posible hacia el vehículo de Harry. Abrió la puerta con vacilación, deslizándose en el asiento del pasajero y mirando hacia el volante en lugar de encontrarse con la mirada de Harry. No sabía si se le permitía.

"Puedes mirarme," le informó Harry. "A menos que te diga lo contrario", agregó.

Louis parpadeó cuidadosamente hacia Harry, descubriendo que Harry lo estaba examinando minuciosamente, "¿Está bien, señor?"

"Has recogido ropa muy decentemente, por lo que veo", tarareó Harry, pero luego sus ojos se posaron en los zapatos de Louis. "Ah. Esos van a tener que irse. No creo que esos vayan muy bien con lo que llevas puesto".

"Oh," balbuceó Louis. "Perdón"

"Solo quítatelos y tíralos en la parte de atrás, simplemente no usarás zapatos", dijo Harry con decisión, y Louis se apresuró a obedecer. "Y abróchate el cinturón".

"Sí, señor", gimió Louis, dejando caer con cuidado sus zapatos en el piso trasero antes de abrocharse el cinturón de seguridad. Harry finalmente se alejó del bordillo y Louis se abstuvo de golpearse la cabeza contra la ventana.

Una vez más, se había hecho quedar como un tonto frente a Harry con su elección de zapatos. Sin embargo, una de las manos de Harry se apartó del volante para colocarse sobre la rodilla de Louis. Envió escalofríos a través de Louis, la sensación de la gran mano de Harry descansando allí. Lo hacía sentir... propiedad, como si perteneciera a Harry, que es lo que se suponía que debía sentir. Trató de no retorcerse, quería ser bueno para su dominante.

Harry los llevó a un restaurante elegante con un nombre italiano que Louis ni siquiera iba a tratar de pronunciar. Se miró los pies, ya temiendo el suelo frío sobre el que tendría que caminar. Sin zapatos, sin servicio, lamentablemente no era una cosa cuando se trataba de relaciones D/s. Si tu dominante quisiera negarte una prenda de vestir, podría hacerlo. Louis estaba contento de que se le permitiera usar zapatos nuevamente. Solo tenía que asegurarse siempre de que fueran con su atuendo.

En el momento en que Harry estacionó, Louis se sobresaltó al ver una gran multitud de paparazzi invadiendo el vehículo. Sus ojos se agrandaron y miró a Harry con un leve miedo, queriendo instrucciones. Harry gruñó hacia las personas que rodeaban su vehículo, ignorando las cámaras parpadeantes mientras volvía su atención a Louis, "No los mires, no les hables e ignóralos si intentan agarrarte. Solo sígueme y no hagas nada para hacerme quedar como un tonto."

"Está bien" Louis asintió lentamente.

Harry salió primero, y Louis salió con cuidado y se apresuró a encontrarse con Harry, porque no solo se sentía un poco claustrofóbico, sino que sus pies ya estaban entumecidos por haber salido del cálido interior del auto de Harry. Estaba mirando sus pies helados mientras Harry resoplaba y ajustaba más el abrigo de Louis alrededor del niño. Lo más probable es que ya estuviera haciendo que Harry pareciera un tonto si su abrigo estaba puesto de manera extraña, pero luego recordó que Harry había sido firme en que Louis no se enfermara.