Parte 1

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Está entrando en pánico.

Sus rizos se mueven con el viento mientras camina frente a la puerta de la empresa de su familia mientras sostiene contra su pecho todos sus planes de vida, su pasión más profunda, pero al mismo tiempo le sudan las manos y le tiemblan al mismo tiempo que empuja las puertas de vidrio y mira el lugar. Ha pasado un tiempo en que no pisaba la empresa de su familia, un tiempo que pasó dando excusas para no hacerlo, porque de lo contrario su padre iba a colocarlo en un puesto importante dentro de la oficina y no podía dejar que sucediera. Simplemente no es algo que quiere para su vida, no quiere estar al frente de una empresa, llevar las riendas cuando su padre decida que es hora de que él lo haga. No es algo que quiera con toda su alma, no como querer ser un gran diseñador de modas.

Ese ha sido su sueño toda la vida y nunca tuvo la suficiente valentía para luchar por sus sueños y decirle a su padre que no quería estudiar administración de empresas o alguna carrera similar que ayude a la empresa. Dejó que los sueños de su papá se volvieran suyos, que sintió que estaba desperdiciando parte de su vida, que estaba viviendo la vida de alguien más y todo lo veía en tercera persona. Nunca sintió amor por lo que hacía, nunca tuvo la fuerza para dejarlo a mitad de camino y dar pasos hacia sus sueños, hasta ahora. Porque está apunto de decirle sus planes a su padre incluso si sale terriblemente mal o sale bien, cualquiera que sea la reacción de su padre no cambiará de opinión. No importa qué consecuencias acarree, él ya tiene su decisión y todos los planes plasmados en varias hojas de papel.

Se irá a París para estudiar en la mejor universidad de modas. Buscará un lugar propio, adoptará un gato y se convertirá en ese diseñador de modas que tanto desea ser, no importa cuánto le tome llegar hasta ahí, disfrutará cada proceso, cada etapa, cada caída, incluso si la primera caída se presenta hoy. Su padre lo ha llamado, alegando que necesita hablar de algo importante con él y tiene la vaga idea de lo que podría ser y de ser así, él dará lucha y le dirá de sus planes.

Toma un largo respiro tomando la valentía de algún lado y entra por la puerta saludando a las recepcionistas que rápidamente lo reconocen y camina hasta el ascensor para apretar el número de piso de la oficina de su padre. Aún lo sabe y eso lo hace suspirar de alivio. Para cuándo las puertas se cierran, debe morder sus labios y mover las piernas con nerviosismo. No sabe cómo se lo tomará su padre, está seguro que nada bien. Es hijo único, no hay manera que alguien más tome su puesto y lo deslinde de esta horrible presión sobre sus hombros y pecho. Simplemente no quiere decepcionar a su padre o incluso a toda su familia.

Alza la cabeza cuando las puertas se abren y puede salir del lugar, pero impacta contra otro cuerpo que también esperaba entrar. Chilla cuando su cuaderno se abre y de ahí vuelan un par de hojas que entra en pánico, no pueden perderse.

—¿Harry?

—Louis—murmura cuando alza la cabeza mientras sus manos intentan recuperar las hojas.

 Always at the right time დ ls [Twoshot]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora