Roble

Capitulo 2 [Silencio]

El día que más detesto llegó. Maldito Lunes. ¿Quién despues de dos dias de descanso se levantaria en la mañana feliz porque es lunes?

Nadie. Absolutamente nadie lo haria.

Ni siquiera los maestros. La profesora de filosofía, que nos tocaba a primera hora, entro torpemente al aula saludando y dejando caer su saco y maletin en el escritorio. Luego bostezo una vez más y se dispuso a dar la clase. Poco despues el director entro para susurrarle algo a la profesora a lo que ella solo asintió.

--Bien chicos. Tenemos un nuevo alumno y compañero-- sonrió y volteo a ver la puerta haciendo un ademán para que pasara.-- Demosle la bienvenida.

En cuanto mis ojos miraron completamente a la puerta, me sorprendí. Dos de mis preguntas habian sido respondidas.

1- Es de mi edad.

2-Siempre tiene cara de malas pulgas. No importa si es mañana, tarde o noche.

La voz ronca se escucho por todo el salon.

--Buenos dias. Mi nombre es Nil.

Silencio.

Fue lo unico que dijo.

La maestra espero que dijera mas pero él no se inmuto y se quedó quieto.

--Bien. Busca un asiento vacío.

Yo voltee a todas direcciones y no vi ningun haciento vacío cerca mio. Hasta que voltee en mi mismo pupitre ye di cuenta que a lado de mi. Era el unico que habia.

Genial.

La suerte me amaba. El cretino se iba a sentar a mi lado.

--Hola.--Le dije cuando se acerco al lugar.

--Mh.

¿Hablaba en monosilabos? ¿Como voy a poder soportar esto? Soy muy parlanchina y no creo que sean de los que tiene mucha paciencia.

La clase continuo. Como si nada hubiera pasado. Pero a mi me estaban matando los nervios con el tipo que estaba a mi lado.

¿Que le sucedía?

Ya se habia molestado tres veces porque no dejaba de usar el borrador y dejaba mucha basura. Es algo de humanos equivocarse.

En la clase de matematicas el profesor Manu. Me dormi. Asi de fácil. Era la explicacion de algun problema y yo ya no aguantaba mis ojos.

Se escucho la campana que daba salida para la hora del receso. Mis ojos se abrieron poco a poco. Y me encontre con esos ojos fríos juzgándome.

--Es de mala educación dormirse en una clase.-- la frase mas larga del dia.

--Eh?... Tambien es de mala educacion mirar a alguien mientras duerme.-- pase mi mano por mi mejilla y note que estaba llena de baba, lo que me hizo sentir mas vergüenza.-- No vas a salir a almorzar?-- Le pregunte pues lo vi sacar un libro de su mochila.

--Mh.-- de nuevo monosilabos

--Pues yo si voy por un pan!-- me levanté del lugar y fui corriendo a la cafetería. Pero antes de salir del salón me tropece con mis pies y caí estrepitosamente.

Silencio.

Me levante y sacudi mi falda. Se escucho un resoplido detras de mi. Al voltear hacia el asiento en el que estaba sentada anteriormente,él estaba aguantando una risa, ocacionando que sus orejas se pusieran rojas.

--Riete todo lo que quieras maldito.--Le dije mientras me iba indignada por su comportamiento.

En el comedor habia muchas personas. Ese era el precio por salir tarde del salón. Ya casi no quedaba nada y decidi que compraria mi pan de nata. A lo lejos divise a mi amiga, la cual habia ignorado que me habia quedado dormida
y me abandonó en el salón con ese cretino. Camine hacia ella, estaba con Joy. Joy era un pan de dios. Y Bria era timida pero atrevida cuando tenia confianza. Hacian la pareja perfecta. Me acerque poco a poco y la saludé.

--Sam!!-- grito al verme.

--Bria... Me dejaste morir sola.--le dije con un poco de desdén.

--El chico da miedo, ni loca me iba a acercar para despertarte.

--Gracias Bria, por tu abandono lo pude ver reir.

--Como?

--Me cai Bria.-- Apenas termine de contarle, ella empezó a reir a carcajadas.

Rodé los ojos y le dirigí una mirada fulminante a Joy quien estaba aguantando la risa.

Me alejé del lugar diciéndole a Bria que no me volviera a hablar. (Lo cual era mentira. Bria ya sabia que solo tenia que darme un chocolate para contentarme.)

Regrese al salón, al adentrarme vi al chico aún en el mismo lugar, estaba leyendo. Me quedé admirándolo desde la puerta. Era grande. Él llenaba el vacío del salón. Sus pestañas eran largas y negras, su cabello estaba ligeramente desordenado, su perfil era perfecto. Ojalá tuviera un mejor comportamiento.

Me acerqué lentamente, él seguia centrado en el libro. Me senté junto a él saqué mi cuaderno y empecé a dibujar mientras terminaba mi pan.

Ahi estaba él.
Ahí estaba yo.
Ahí estabamos llenando un lugar vacío.

Hola^^!!