capitulo 3

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Me desperté con una sonrisa en los labios, lo de ayer con Vic

estuvo realmente bien. Sus besos son simplemente perfectos, sus labios

están hechos para besar, si no fuera porque no estábamos en el

lugar adecuado definitivamente me hubiera entregado a él.

Dios lo mojada que acabé después de aquel beso y de que me

pegara tanto a él sintiendo su erección dura contra mí sexo

fue increíble, pensé, y solo al acordarme de aquello me excité.

Esta no era yo, nunca cedía con nadie, nunca nadie había provocado esto en mí, obviamente tuve relaciones antes, aunque solo con mi

ex novio Brad, pero no disfruté ni la mitad de lo que

disfruté ayer ese beso con Vic.

Necesitaba acabar de una vez con esto, pero tengo que

provocarlo hasta que me suplique que lo toque.

Me di una ducha de agua fría para calmar mis ansias

de él y bajé a desayunar con mamá.

Estuvimos un largo rato hablando y desayunando, cuando

de repente escuchamos a Vic gritar desde la ducha.

- ¿Alguien me puede traer una toalla? - gritó Vic.

- ¡Ya voy Vic! - le contestó mamá.

- Tranquila mami, ya se la llevo yo - sonreí, desde luego no podía desaprovechar esta oportunidad.

- Gracias hija, yo voy a recoger todo y fregaré los platos - dijo mamá levantándose de la mesa - y después hare unas llamadas - bien, pensé, mamá tarda horas en sus "llamadas".

Subí, cogí una toalla y entre al baño. Vic seguía

en la ducha así que sin pensarlo dos veces me quité

toda la ropa y entre sin hacer ruido, el sonido del agua

de la ducha me ayudaba. Estaba de espaldas, se veía realmente sexy.

Lo abracé por detrás pegándome a él.

- ¿Puedo ducharme contigo? - le susurré al oído, se sobresaltó y se dio la vuelta rápidamente.

- ¡¿Qué diablos haces aquí _____?! - dijo mirándome atónito.

- Te hice una pregunta - respondí pícara.

- Ya estas dentro - contestó - sal de aquí, tu madre nos puede ver.

- ¿Eso es lo que te asusta? O ¿Es que sabes que podrías perder? - dijo acercándome a él, estaba muy sexy así mojadito y desnudo, demasiado diría yo.

- Realmente sabes jugar bien "hermanita" - dijo cogiéndome de la cintura con ambas manos, pegándome a él.

Inmediatamente pude sentir su miembro cobrando vida,

cosa que me excitó tanto que no pude evitar unir

nuestros labios en un beso, un beso apasionado, nuestras

leguas luchando, produciéndonos una inmensa excitación,

mis manos se perdían en su pelo mojado y las suyas

apretaban fuertemente mi trasero. Se nos comenzaba a

agitar la respiración y le mordí fuertemente el labio inferior,

Apostando- vic fuentesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora