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-¿Podemos ir a almorzar?- preguntó Lucius invitando a su hijo. Quien no había desaparecido y seguía intacto.

-¿Sí?- respondió sin entender.

-Bien, vamos.

-¿Ahora?

-Sí, Severus nos espera en la puerta.

Draco sonrió.

El adolescente de 17 años, cuál niño pequeño comenzó a preguntar cada detalle de su relación mientras caminaban a Hogsmeade.

Draco estaba completamente emocionado. Veía a su padre feliz, nunca lo había visto feliz.

Snape también era feliz, tampoco lo había visto feliz nunca.

Esta época era hermosa. Y todos eran felices, antes de voldemort.

-¿Y cómo fue su primer beso?

Ambos se miraron mientras esperaban la carta.

-¿Por qué no nos cuentas un poco de tí? Ya tendremos tiempo para hablar de eso.

-Bueno, me gusta leer, me gusta Potter. Me gusta perseguir a Potter. Me gusta ver a Potter entrenar.

-Te gusta Potter.

-Sí- suspiró enamorado Draco, dándose miedo a sí mismo.

El patronus de Harry apareció por la puerta.

-Ese es el patronus de Potter- habló Draco.

-¿Qué Potter?- preguntó Lucius.

-Mi Potter.

Harry le preguntaba si estaba bien, que no lo encontraba.

-Debo irme. Harry está preocupado por mi.

-Mándale un patronus.

-Lo que pasa es que no tenia ningún recuerdo feliz hasta que viajamos al pasado. Nunca aprendí a hacer el patronus por eso mismo.

Severus y Lucius se miraron, preocupados.

-¿Qué estamos haciendo mal?- preguntó Severus.

-No puedo hablar del futuro. Pero por favor sigan juntos- pidió a Lucius.

-¿Quieres decir que en el futuro no estamos juntos?

-Solo sigan juntos, por favor. Y no sigan al señor tenebroso-pidió, asustado.

-No te preocupes, no lo dejaré- Habló Snape-yo le mandaré un patronus a tu novio para que te quedes tranquilo ¿sí, cariño?- habló tomando la mano de Draco, quien asintió.

¿Donde están tus padres?//Jegulus/HarcoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora