004

338 43 0
                                    


                    - - - - - - - ×∆× - - - - - - -

"No me jodas, Jimin"

"Ellos dos te están matando las pocas
neuronas que te quedan"

"Ya basta", Jimin murmuró, bufando
mientras se llevaba la boquilla de su
cerveza a la boca para darle un trago.
"Es que eres idiota", Mingi le palmeó el
muslo, con Taehyung asintiendo como un
perrito.

"¿Por qué decidiste darles otra
oportunidad si la semana pasada decías
que estabas harto? No sé tú, pero a
mi me daría miedo vivir junto a dos
celópatas capaces de atentar contra mi
vida", Taehyung le cuestionó, Jimin
pudo ver a Jungkook alzar las cejas
curioso mientras traía una bandeja con
gran cantidad de tentempiés.
Una semana y media había pasado
de aquel día, los cuatro estaban en
el departamento de Jungkook ese
sábado por la noche aprovechando que
todos tenían libres los domingos de
sus trabajos. Como siempre, la pareja
ideal de Taehyung y Mingi apegados como
lapas y Jungkook con él mismo siendo
los espectadores de la cliché relación
pegajosa de ellos dos. Jimin no estaba apartando los ojos de Mingi
porque si lo hacía se acordaba de como
se había llevado a Jungkook entre besos
y mordiscos hacia su habitación por ese
pasillo, incluso podía alucinar con ver
su bolso de ese día tirado a un costado
del pasillo y era algo... perturbador, más
aún teniendolo cerca rondando como si
nada hubiese pasado. Ni Taehyung ni Mingi
se habían enterado de lo sucedido y ellos
parecían seguir siendo el típico ejemplo
del gato y el perro. Todo iba bien, pero
en estos momentos Jmin no podía
dejar de repetir como se había acostado
con ese enano.

"Son inofensivos, Taehyung", habló, casi
olvidándose de la conversación.

"¿Lo son? Acabas de contar que una
vez viste como San casi le entierra un
tenedor a Wooyoung en la mano y que
viste un marco de fotos partido con la
foto hecha añicos, ¿seguro no duermes
con un ojo abierto en esa casa?"

"Lo hace y se lo sacan, que no lo intente",
Jungkook bromeó, cruzando sus
piernas al sentarse en el único espacio
disponible, al lado de Jimin.
Jimin tragó saliva y no quiso
mirarle, hoy Jungkook igual estaba
ridículamente lindo. El cabello partido con algo de volumen, un beatle negro
de cuello alto y una camiseta beige con
flores bordadas apegándose a su pecho
y asquerosos -mentira- pantalones de
cuerina.

"Realmente eres estúpido", Taehyung se
quejó

"Estúpido e idiota", Mingi siguió con una
risa.

"Estúpido, idiota y un si-", Jungkook iba
a seguir.

"Ya entendí, pueden dejar de
insultarme", otro trago a su cerveza,
se inclinó con el ceño fruncido hacia
la mesa para agarrar tres canapés de
una y echarselos a la boca con molestia,
ignorando las risas de los tres.

"Jongho quería venir", habló Mingi luego
de un rato. Jimin frunció el ceño,
la bestia que tenía Mingi de hermano
era un demonio parlanchin odioso. Más
encima tenía una clase de fijación por
él, cada vez que lo veía el niño quería
su atención o estar encima suyo, ¡Era
odioso y baboso!, le comenzaba a hablar
de cualquier estupidez y Jimin no
tenía la paciencia para lidiar con un
niñito que no pesaba lo acorde a su edad y que más encima se parecía a Mingi en
personalidad.

"¿Y por qué no lo haz traido? Es un sol",
miró a Jungkook luego de hablar como
si le hubiese crecido otra cabeza.

"Tiene nueve años, ¿qué va a hacer
entremedio de cuatro hombres gays
tomando cerveza y que seguramente
dos de ellos van a comenzar a hablar de
sexo?", con sus cejas apuntó a Taehyung y
Mingi, Jungkook soltó una carcajada.

✘『STUPID BOY』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora