☾ 06 ☾

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Primera cita, con orden extra de honestidad 

La puerta de su habitación se cerró con tanta fuerza, que las paredes resonaron. Apoyó su espalda contra la pared y suspiró agotado. Su corazón aún latía rápidamente, y le preocupaba que se saliera de su pecho.

-¿Soobin?- Su hermano mayor golpeó la puerta y lo llamó- ¿está todo bien?-

Sabía que si no le respondía, él entraría, y justamente, eso era lo que menos quería.

-Si Minho, todo en orden-

Aunque no estaba convencido, él se retiró, pero no sin antes hacerle saber que podía hablar con él si lo necesitaba.

Lee Know se preocupaba constantemente por su hermano menor. Después de haber perdido a sus padres, Soobin dejó de confiar en las personas, ya que debido a aquellos a los que alguna vez consideró una familia, terminó perdiendo a las personas que más amaba.

Soobin se cerró ante todos, y no volvió a hablar con extraños, solo con su hermano. Aquello le inquietaba a Lee Know, ya que eso no era lo que deseaba para él. Si algo le pasaba, Soobin se quedaría solo, y eso era lo que menos quería.

-Ya cálmate- Se dijo a sí mismo en voz alta.

La presencia de Yeonjun lo había alterado más de lo que esperaba.

-¿Por qué ahora?- Se preguntaba, ya que esto definitivamente no era lo que él quería.

No deseaba encontrar a su pareja, no quería estar atado a alguien. Lo que menos necesitaba en este momento era este sentimiento extraño en su pecho, y la necesidad de ir corriendo a ver a Yeonjun.

Los licántropos dependen de su pareja, tanto como el aire que respiran, sin ellos, se morirían. Soobin no estaba de acuerdo con el hecho de que la diosa Selene eligiera a quien debía amar, él quería que esa decisión fuera suya, y ahora mismo, no necesitaba a nadie más, aparte de su hermano.

Una fuerte risa llamó la atención de Soobin. Se acercó a la cama, y sentándose de rodillas miró por la ventana que estaba detrás de esta. Yeonjun estaba allí, riendo y corriendo atrás de unos niños. Su cabello castaño brillaba, sus ojos se achicaron, y en su rostro apareció una gran sonrisa, la cual fue lo suficientemente hermosa como para alterar los latidos de Soobin.

Sacudió la cabeza y se dirigió a la mesa de luz. Sacó sus auriculares de un cajón, los conectó a su celular, y comenzó a reproducir su lista de canciones en aleatorio. Necesitaba alejar aquel sonido de su mente, la risa de Yeonjun.

☾❀

Los días que siguieron, Soobin se mantuvo ocupado en su habitación, ignorando a todos. En los momentos que tenía que ir a entrenar, se escapaba y ocultaba, evitando las clases, y especialmente a Yeonjun.

Las veces que no estaba, el beta no dejaba de buscarlo. No sabía si había dicho algo que provocará que Soobin lo evitara, o cual era la razón por la que huía de él, pero deseaba solucionarlo. Sin embargo, eso era complicado, debido a que él es muy bueno para esconderse, y Yeonjun muy malo para encontrarlo.

Un día caluroso, Soobin decidió esconderse junto al arroyo que había cerca de la manada. Había traído sus auriculares con él, los cuales llevaba a todas partes, así que se dispuso a escuchar algo de música mientras observaba el hermoso paisaje natural.

Estaba tan centrado en las canciones que se reproducian aleatoriamente desde su playlist, que no noto la presencia de otra persona, que se acercaba sigilosamente desde atrás.

𝑴𝒚 𝒎𝒐𝒐𝒏𝒍𝒊𝒈𝒉𝒕 ᵐⁱⁿˢᵘⁿᵍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora