— Gallo, no te.... –Iba a hablar Quintanilla pero Josefina lo interrumpe.
— Tu no tienes por qué hablarle así a mi hermana.
— Bueno, ¿Es que aquí nadie se ha dado cuenta que todo lo que ha pasado es culpa de esta vieja? haré la muerte de mi 'ama –Grito Erick y se levantó para acercarse a Sara– ¿Que pasa, mija? ¿no te has dado cuenta que el teca está obsesionado contigo, eh? Esto no va a parar chula, hasta que logre tenerte en su cama.
Sara le dio una cachetada y me levante.
— No te pasas de listo, bato, aquí respetas o te enseñó a respetar –dijo tepo apuntandole a erick con su arma.
— Baja eso. –Dije y obedeció.
— Calmados todos. estamos chupando tranquilos –Dijo quintanilla.
— Decile a ella, tío.
— Mira, yo no he hecho nada en mi vida para provocar al Teca Martínez.
— Mira pela'ito, aquí todos me debemos la vida a Sara, solo que vos acabas de llegar y no entendés nada –Hablo Miriam.
— ta' bueno chula, pues, fijate que yo no le debo ni el agua, en cambio a mi 'ama la mataron por su culpa. así que yo contigo, güerita, ni a la esquina. ¿Tu que tío? ¿te vas quedar con esta morra? ¿me vas a traicionar? ¿la vas a poner encima de tu familia? ¿de mi? ¿que soy tu sobrino? Habla, hombre.
— Grabate esto mijo. vos podes ser muy sobrino de quintanilla y todo lo que queras, ¡Pero a mi mujer la respetas!
— ¡Haz algo Miguel, por favor! ¡no nos puede hablar así! –dijo josefina.
— Callate guasampira, no ves que esta así por lo que le pasó, esta hablando por el enojo y el dolor –le dije.
— ¡A ver, A ver, los dos quietos! no se trata de discutir lealtades, sino de actuar y hacemos mucho mejor actuando juntos, que separados. ¿Ok? Erick, sara es mi ahijada, es mi aliada desde hace mucho tiempo, desde que eras morrito. y Sara.. ¡Erick ss mi sobrino! El tiene que estar en la organización al igual que tu hija. Yo se lo prometí a su madre, y a él también.
— yo no tengo problemas ¡mientras que el no los invente! –Dijo Sara.
— ¡y vos, mija! — dijo Quintanilla mirándome —. ¡Bajale dos rayitas a tu bronca con Josefina! ¡tu también, Josefina! ¡todo el día peleando, hombre!
— ¡Estamos en un guerra contra el Teca Martínez, no entre nosotros! — dijo Sara.