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Beomgyu estaba bajoneado, su madre intentó animarlo toda la mañana durante el desayuno, pero él a pesar de intentarlo suele acordarse de Yeonjun y siente ese algo en el corazón que lo lastima.

Solo sé fuerte, hijo — Murmura su padre a su lado antes de que se vaya a casa de Yeon —

Esa mañana Yeonjun tenía cita para la quimioterapia y no quería ir solo, pero a la vez no quería que sus padres lo acompañaran por lo que Beom se ofreció a ir con él y pues bajo los ojos de su novio no podía negarse.

Beomgyu estaba nervioso porque no sabía cómo se iba a sentir al ver a su pareja en aquel lugar del hospital; sin embargo, no lo iba a dejar solo por nada, lo iba a apoyar e iba a ser fuerte.

Yeon tenía puesto un buzo enorme, tenía puesto un gorro y se aferraba a la mano del menor cuando llegaron al hospital.

Beomgyu depositó varios besos sobre la cabeza de Yeonjun, y esperó paciente a que llamaran a Yeon

Tengo un asco enorme — Comenta Yeon, recargando su espalda sobre la pared, pero sin soltar su mano — Odio todo — Beom alza las cejas y Yeon ríe un poco — Menos a ti, mi amor.

Más te vale — Se acerca más a él pasando sus manos sobre la cintura de su pareja, este lo mira a los ojos y sonríe levemente —

¿Qué? — Pregunta cuando Beom no deja de mirarlo, pero tampoco lo besa.

Nada —

¿Nada? — Cuestiona y lleva sus manos hasta la nuca de Beom acariciando su cabello.

Si pudieras concebir, bueno... —  Empieza, y Yeon alza las cejas. Beom se ríe al ver esa expresión de su novio — Un hijo ya tendríamos.

Eres ridículamente cursi. — Yeon rueda los ojos y el otro se ríe más —

¿No te gustaría? — Cuestiona y Yeonjun niega haciendo una mueca graciosa —

Estás enfermo — Comenta con gracia y se ríe leve hasta que una enfermera los llama —

Yeonjun borra su sonrisa y mira hacia la enfermera. Beom se aleja un poco y vuelve a tomarle la mano con suavidad.

Por acá, por favor — La enfermera hace una seña con la cabeza y ellos intercambian miradas. —

Beomie le sonríe y Yeonjun siente su corazón latir con más fuerza, ¿en serio quería que Beomgyu viera aquello?, ¿lo iba a torturar así?

Sin darse cuenta Beom y él estaban caminando detrás de la enfermera. Yeonjun miró a lo lejos en el fondo del pasillo una puerta color azul, supuso que ahí era donde iba a recibir la quimio, tragó saliva y pasa en seco...Beomgyu se para en seco también cuando siente ser jalada.

Mira a Yeon con un gesto suave de interrogación, su novio lo miró devuelta y no escucha respirar hondo.

¿Puedes esperar afuera? Por favor — Pide Yeonjun

¿Cómo? — Ladea la cabeza, no quería esperar afuera, quería estar a su lado —

No quiero que me veas ahí adentro, seguro es terrible — Comenta excusándose, Beom niega lento y le acaricia la mano —

Dará miedo, no? — Cuestiona, y Yeon asiente — Entonces nos vamos a asustar juntos, ¿vale?

No quiero hacerte daño —

Y ahí estaban devuelta regresando a lo mismo, Beomgyu mira un momento las paredes del hospital y luego a Yeon, que también lo ve a él.

¿Quieres que espere afuera? — Pregunta de manera tranquila — Lo hago si quieres eso realmente.

Yeonjun lo piensa

No quiero que te vayas... — Murmura, Beom le sonríe de lado, se acerca para darle un beso en la frente —

Está bien. Vamos — Lo anima en un susurro y tira de él para empezar a caminar. La enfermera parece esperarlo paciente en la puerta. —

La enfermera le dice que tome asiento en un cómodo sillón blanco y que repose su mano sobre un pequeño instrumento de acero. Yeonjun le hace caso mientras se dobla la manga y Beom toma asiento en una silla del hospital.

La enfermera les dice que esperen ahí hasta que llegue del médico de Yeon, ambos asienten. Yeon y Beomgyu están divididos por cortinas azules a cada lado que los alejan de los otros pacientes, el lugar es callado y parece aburrido.

Yeon observa a su novio mirar el lugar, él haría lo mismo pero sólo quiere admirar a Beomie.

Buenos días — Dice el doctor

Buenos días — Responden

Bueno, yo soy su doctor, joven... — Toma los papeles y lee el apellido "Choi", Choi Yeonjun.

Beom le acarició la mano escuchando con atención lo que decía el doctor, luego de unas preguntas empezaron el tratamiento.

Yeon estaba concentrado en lo que Beom le platicaba sobre las próximas presentaciones  que daría con los chicos, y estaba feliz de que ellos tuvieran tanto éxito. Le hubiera gustado seguir en el grupo, estar con ellos otra vez, pero su enfermedad no le permitía.

Le observó todo el rostro y admiró aquellos ojos que tanto amaba, Beom también lo observó mientras hablaban y le sonreía de vez en cuando.

No quería dejarlo ni un momento, si aquello significaba algo para mejorar la vida de su novio; entonces él iba a estar ahí, pero mirar al doctor negar con la cabeza de vez en cuando mientras otras leía los estudios de Yeonjun lo hacían querer llorar ahí mismo.

Miró a su novio dormir y respiró hondo, tenía tanta ganas de llorar que le dolía mandíbula.

Voy a estar contigo siempre — Promete cerca de la mejilla de Yeom, el cual está completamente dormido y espera que la quimio termine —

Look after you; YeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora