Mi amor por ti (madahashi y tobiizu)

Explicaciones a medias

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Actualidad

En un lugar muy lejos del territorio de la que era la tierra del Fuego,donde el sol ya terminaba de salir, ocurrió una masacre, lo curioso de esta masacre es que todos los fallecidos tenían cortes pequeños, nada que pudiera causarles la muerte, toda una organización desapareció de la noche a la mañana, todo fue a causa de la misma persona que miraba todos aquellos cadáveres con desprecio, los miembros de esta organización eran en simples términos eran de la peor calaña, eran unos seres detestables, así que no hubo ni una pizca de culpa en haber cometido tal acto; Una vez de haber liberado a todos sin que nadie descubriera su identidad, huyó rápidamente de ahí, durante el trayecto escuchó un par de ruidos bastantes conocidos, subió hasta la copa de los árboles, donde le esperaban un par de aves mensajeras, una vez recogió los mensajes les dio algo de alimento a estas, sonrió bajo su máscara y luego abrió los mensajes.

"Ven rápido quiero hablar contigo sobre algo importante, no es de vida o muerte, pero apresúrate"

Atte.: Madara Uchiha

"Quiero tu ayuda para algo, ven lo más pronto que puedas"

Atte.: Tobirama Senju

—Vaya que interesante, ¿será que mi corazonada tiene razón? Lástima que no puedo ir ahora, debo de completar mi misión, pero una vez hecha nada podrá detenerme en ir a la aldea, ¡A trabajar! así me enteraré más rápido del chisme—dijo esa AMBU, escribió una respuesta breve y mandarla de vuelta con las aves, para despues saltar de la copa del árbol y antes de caer en el suelo desapareció por completo.

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2 semanas atras

En otra parte, para ser más específicos en la Aldea de la hoja

—Hey, para de caminar de un lado a otro, pareces león enjaulado, ¿por cuánto tiempo seguirás así? ya es algo molesto y triste de ver, sé que eres un animal, pero esto ya va muy lejos.

—Hasta que ya sabes quien regrese— responde envuelto entre sentimientos de enojo y desesperación.

—O sea, ¿estas así porque no puedes salir a hacer misiones porque obligatoriamente deben ir ambos? Se ve que confían mucho en ti— comentó agregando algo de cizaña para hacer enojar aun más a su amigo y compañero.

—Cállate, ¿quieres? No es que no confíen en mí, es que me cuesta controlarme... solo un poco en batalla y podría terminar cometiendo un error que nos podría costar muy caro, y esa personita sabe controlarme, aunque me cueste admitirlo.

—¿Qué te cuesta admitirlo? Hermano, hasta parece que lo haces todo apropo- — fue callado por la mano y mirada amenazadora de su mejor amigo, y no pudo evitar pensar que aun con esa mirada amenazadora y cara seria, hay tantas mujeres tras él y no les hace caso, es un desperdicio según él.

—Cállate o te mato—dijo para después quitar su mano de la boca de su ahora nervioso amigo—Cambiemos tema ya que soy un ser muy bondadoso y no pienso matarte aún.

—¿Aun? Que malo eres conmigo-el contrario solo rodo los ojos—Mmm ah si, dentro de unos días llegará Mito-sama a quedarse en nuestra aldea junto a su prima Damira-sama, y nos asignaron como sus escoltas.

—Querrás decir sus asistentes que estarán a cargo de llevar todo su equipaje (Aunque sé de alguien a quien no le gustará esa noticia), ¿algo más?

—Se dice que Mito-sama tiene planeado casarse con alguien de la aldea, y se cree que sea con Hokage-sama, lo cual sería bastante lógico y probable— al terminar de hablar se pudo escuchar una gran carcajada de parte del otro y una vez se calmó, habló.

—Lo dudo mucho, pero ¿quién sabe no te parece?—comento con burla para despues caer al piso muerto de risa y con su amigo mirandolo con una mezcla de terror y preocupacion en sus ojos preguntandose porque es amigo de ese loco en primer lugar.

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El sol comenzaba terminaba de ocultarse, se empezaban a encender las luces en la aldea, y un castaño bebiendo y disfrutando de su propia compañía o eso era lo que pretendía. Cuando se es Hokage también te vuelves muy popular, en su mayoría entre las mujeres, que estaban en busca de ser la esposa del Hokage y más cuando este es conocido como
"El dios de los Shinobis", Hashirama Senju.

Hashirama tenía mujeres a su izquierda y a su derecha, todas intentando coquetear con él, y él trataba con educación de rechazarlas, sin embargo, todas hacían caso omiso, intentando pegarse más, sobretodo los senos; Todo esto ya era una tortura para aquel hombre, quien habia optado por beber e ignorar a aquellas mujeres, según él, pronto se irían al ver que no les haría caso, y así pasaron las horas.

El dueño del local, logró espantar a la mayoría de esas molestas mujeres, quedando ya solo dos: una le jaló tan fuerte del brazo a Hashirama, que hasta la quedó viendo con ojos que demostraban su disgusto mientras sus labios se arqueaban hacia abajo, definitivamente ya estaba harto; la chica había aprovechado que Hashirama se había volteado a verla, y así su compañera agregar una droga.

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—¡Carajo no puedo dormir! ¡Cuatro jodidas horas intentando dormir como una persona decente y no puedo!—gritó un muy enfadado Madara, por alguna razón no podía conciliar el sueño, eso no era muy común en él; y no podía desahogarse con su hermano, ya que por mucho que grite, este duerme como un tronco— Joder, me iré a caminar, tal vez me ayude a conciliar el sueño...

Así que el pelinegro se vistió para ir a caminar un rato. Después de salir de su casa, se empezó a tranquilizar, y a medida que caminaba, disfrutaba su alrededor, le fascinaba ver las luces y el encanto nocturno de la aldea; Justo cuando iba caminando por los puestos, escuchó una voz familiar.

—Y-ya sueltenme, quiero mi espashio persssonal— Hashirama debido a la droga no podía hablar ni pensar bien, el azabache al escuchar la voz de su mejor amigo, fue de inmediato y vio como dos chicas tenían sus senos casi completamente al aire, ya que tenían la intención de que el castaño las acariciara, aunque no lo lograron.

El dueño del local se asustó al ver al Jefe del Clan Uchiha y Co-fundador de la aldea; apesar de tener sus nervios al tope, le explicó al azabache lo que ha estado pasando, este no ocultó su disgusto e ira; Su ira era tanta que no dudo en activar su Sharingan, atrapando ambas mujeres en un Genjutsu donde vivirían su peor pesadilla.

—Yo me encargaré de él— dijo, mientras dejaba una generosa cantidad de dinero al señor del puesto— Usted no se preocupe por ellas, estarán bien, pero el acto que cometieron fue algo muy grave (se metieron con lo que es mio) así que serán arrestadas- dijo mientras llevaba al castaño en su espalda

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—Hashirama, sabes tan bien~♡

—¡Ah, me vengo!

Continuará...