la verdad tras el chico de 16.

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Las manos de luz temblaban, asustada, nerviosa, no podía entender la razón de ello, pero todo esto era demasiado rápido y no sabía que hacía Hunter, ni tampoco si quería verla. Los nervios aumentaron aún más cuando la puerta se abrió enfrente de ella.

—¿Luz..? —La voz temblorosa del chico le puso los nervios de punta a Luz al instante, los nervios la consumieron mucho más que antes—

—Hunter...—Asomo su mirada para mirarlo a los ojos, parecía que no había dormido nada, se veía cansado, aún tenía la pijama, y tampoco sabía con exactitud que me estaba moviendo adentro—

—¿Puedo pasar?

La mirada de Hunter se suavizó, miro hacia atrás, para luego mirar a Luz quien parecía que sus ojos brillaban en la oscuridad del pasillo.

—Tengo un desastre...—Trato de excusarse mientras evitaba el contacto visual con ella—

—Por favor Hunter, lo que sea, puedo ayudar, de verdad...

Hunter sintió un nudo en el estómago, las ganas de abrazarla con toda la fuerza como si fuera lo último del mundo, lo necesitaba. Luz era como su pequeña luz de esperanza. Nada de lo que había pasado era su culpa y el lo sabía.

—Esta bien...—Abrió la puerta dejando ver muchas cajas y ropa en la cama. Ella observaba todo mientras él cerraba la puerta—

—En serio lo siento...Luz. yo no debí irme...—

Luz tomo su mano sin preguntar y lo sento en su cama junto a ella y lo abrazo rápidamente. Aunque Hunter estuviera sorprendido la abraza y no noto cuando las lágrimas comenzaron a bajar, dios enserio eso era necesario. Más que necesario.

–Luz...yo en verdad...—

—Esta bien...todo esta bien...—Acaricio su cabeza de forma cariñosa.—

—Gracias Luz...—

El corazón de la chica salto al escuchar esas palabras, se siento feliz, tranquila, y contenta con el hecho de que el no estuviera molesta con ella, su respiración tranquila la hacia estar feliz, aunque seguía tirando pequeñas lágrimas estaba segura de que lo mantendría a salvo, incluso si tenía que ir contra la misma Amity para lograrlo.

Pocos minutos después llego Lilith con los chinos chocolates calientes mirando con dulzura la escena. Dejando ambas tazas con Luz cerrando la puerta al salir

—¿Quieres chocolate?—Pregunto lo adulta. Era un ambiente realmente tenso teniendo en cuenta que habían pasado muchas cosas en pocos minutos. El chico no respondió inmediatamente—

—Esta bien, puedo enfriarlo si quieres —Susurro tomando la taza de sus manos—

—No tienes que..._

—Claro que si, estoy aquí, y te ayudaré para lo que sea—Hablo sonriendo mientras se sentaba de nuevo a su lado.—

—¿Fue Lilith quien te trajo cierto? —Pregunto el rubio con el seño levemente fruncido.—

—Eso no es importante, estoy aquí y aquí me quedaré—Objeto para darle la taza.—

—¿Te vas a quedar?—Pregunto ligeramente sorprendido y confundido.—

—Si...voy a ayudarte Hunter, haré lo que pueda. Lo prometo.

El chico jugeteo con sus dedos en la taza. Un movimiento en falso acabaría con el chocolate pero eso no parecía importarle en ese momento.

—Yo...¿no te doi asco?

Luz abrió los ojos como platos. ¿Asco?
¿De el? ¡Claro que no! No es su culpa, entonces no estaba molesto, tenía miedo de que me burlara de el. Ay no...

—Hunter claro que no...no es tu culpa...—

—Amity tiene razón.—

—¡Por supuesto que no!—

Hunter la miro sorprendido, era la primera persona en tanto tiempo en decirle eso, algo en su corazón parecía moverse al instante.

—Te quiero mucho Hunter, eres importante para mí, quiero ayudarte y haré todo en mis manos para hacerlo—Afirmó, colocando su mano encima de la suya.—

Se podía sentir la armonía en la habitación, las miradas se mezclaron en el ambiente. En un segundo Hunter se acercó lo suficiente como para mirarla a los ojos, Luz suspiró en sorpresa mirando sus cercanías cuando el chico rubio bajo la mirada a sus labios, las mariposas en el estómago de la morena, salieron volando como si hubieran pegado un tiro.

—Yo.., ¡tengo que ir al baño!—De excuso con vergüenza cayendo al suelo en el proceso. Hunter estaba punto de levantarla. Pero esta hablo.—¡Estoy bien!—Corrio hacia al baño y cerró la puerta de un portazo.—

Después de un par de minutos avergonzada en el baño bajo para ver a la señorita Clawthorne y a Hunter sirviendo la comida tranquilamente mientras Luz llegaba abajo con un tono rojo fuerte es su cara.

—¿Vas comer Luz? No soy tan buena cocinando pero hago lo que puedo—Sonrio justo como una madre haría.—

Luz se sorprendió, por primera vez vio a la señorita Lilith sonriendo con calidez. Sonrío inconscientemente  sin percatarse que Hunter se había levantado para sacarle hacia atrás la silla.

—La señorita pies torpes primero—Luz cruzó sus brazos sonrojada.—

—Y...—Comienza hablando Lilith mientras se sienta a comer—¿Todo en orden?

Los chicos se miraron y ascendieron al mismo tiempo.

—Estaba pensando Hunter, ¿no te molesta si Luz duerme en tu cuarto verdad?

Luz literalmente se había  atragantado con el pedazo de carne luego de que la mujer dijera eso.

—Claro, en un colchón al lado de tu cama —dice la mujer tirando una pequeña risa mientras veía de reojo a ambos chicos—

—Claro, no tengo ningún problema madre —Accedió tranquilo terminando su comida levantando su plato—

Hubo un pequeño silencio, Luz los miro a ambos de reojo. La señorita Lilith dejo caer el tenedor por accidente sobre el plato de comida.

—¿Dije algo malo? —Pregunto algo asustado mirando a ambas chicas—

La señorita Lilith se levantó rápidamente y lo abrazo, este se sorprendió pero le abrazo del mismo modo sonriendo. Luz sonrío y desapareció de la escena

—¿Hice algo malo?—Cuestiono correspondiendo el abrazo apenado

—No hiciste nada malo pequeño...—Murmuro soltando unas pequeñas lagrimas—

Cuando el rubio está apunto de decir algo, llego luz con su teléfono.

—¡Sonrian! —Levanto el celular para tomarle fotos.—

Se tomaron unas cuantas fotos y todos reían y se divertían. En una de esas la señorita Lilith le susurró al oído

—Te quiero mucho, yernita.

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