ꗃ⌯ཻׄ𝙶𝚒𝚖𝚖𝚎 𝚖𝚒𝚕𝚔︙BibleBuild

🥛៹࣪ 𝟬𝟵 ❲🐄❳

Build escribía conforme leía en la pantalla de su computadora y repetía para que Sammy, su compañera de clases, también tuviera conocimiento de algunos puntos importantes del proyecto que les habían asignado a hacer juntos.

En uno de esos momentos en los que se tomaban un respiro entre tantos papeles que estudiar, Sammy habló, confundiendo a Build.

— Aun no entiendo... — dijo ella, Build frunció el ceño.

— ¿Que no entiendes? No es realmente difícil, la manera en la que nos dirigimos a las personas importa porque-... — mientras Build explicaba, Sammy lo detuvo.

— No, es decir, tú y tu alfa, lo siento porque realmente no me incumbe, pero si llevan comprometidos tantos años ¿por qué apenas empezaron el cortejo? — preguntó Sammy con los ojos brillantes de curiosidad.

— Es una historia un poco rara... — Build rio y Sammy le pidió seguir. —... Bueno, cuando tenía quince años, ya sabes, soy un chico del campo, la granja de mi padre empezó a tomar un poco más de reconocimiento en el mercado orgánico, ya que, no es por presumir, pero los productos de mi granja son de altísima calidad, los señores Sumettikul, y también Bible, consumen muchos lácteos y proteínas de todo tipo, así que se reunieron con mi padre y él comenzó a proveerles los productos por venta al mayor, pero bueno, la historia no empieza ahí, empieza cuando acompañe por primera vez a mi padre a entregar los productos a la casa de la familia Sumettikul...

«Build bajó del camión con el ceño fruncido y los brazos cruzados, su padre lo había obligado a acompañarlo y ayudarlo con los pedidos de la granja ¡Build debía estar en la granja, su vaquita lola iba a tener un bebé!

— Aww, vamos chiquito, no te enojes con tu padre. — Dijo el señor Puttha, acercándose a su hijo para revolver su cabello blanco con mechones en negro, teniendo cuidado con los cuernos del joven y dejando una caricia en sus orejitas.

— Si lola tiene a su bebé hoy y yo no estoy con ella, no te voy a hablar más. — amenazó Build, y el hombre río.

— Hombre, deja de quejarte ya y toca el timbre de la casa pues, yo voy a ir bajando las cosas del camión. — le ordenó el señor Puttha a su hijo, que a regañadientes se dirigió hasta la entrada de la enorme casa, tocando el timbre de ésta.

Había escuchado que eran una familia con mucho dinero ¿por qué vivían en un vecindario común? Meh, como sea, Build sólo quería llegar a casa para ayudar a lola. Tocó el timbre por segunda vez y de inmediato alguien abrió la puerta, un chico un poco alto, de cabello castaño y unas orejitas escondidas entre su cabello, piel pálida y ojos pequeños, parecía recién haberse despertado.

— ¡Hola! Venimos a entregar un pedido de la granja Puttha, ¿están los señores Sumettikul? — dijo Build, tratando de ser lo más amable posible, de repente el rostro de él chico pálido se volvió totalmente rojo.