tritón ❧ kookv.

Noches platicando en el mar.

Cuando Jungkook despertó Taehyung no estaba y al salir de la cabaña encontró una pequeña pila de pescados.

Namjoon estaba sentado en su gran trono, Seokjin se encontraba a su lado, Jimin y Hoseok se encontraban detrás de los tronos de sus padres todos mostraban seriedad en sus rostros, Taehyung entró a la sala real.

—¿Dónde te vas todas las noches, Taehyung? —Namjoon estaba muy serio.

—No me voy a ninguna parte papá —dijo una falacia.

Seokjin acarició la mano de Namjoon con cariño.

—Me han dicho que sales de noche, Taehyung, me preocupas —Namjoon soltó un suspiro—. No quiero que algo malo te suceda hijo, hay islas cercanas donde hay humanos y no me quiero imaginar si caes en alguna trampa.

—Tranquilo padre no estoy yendo a una isla cercana —sonrió mostrando confianza.

Hoseok y Jimin sólo se miraron con los ojos entrecerrados.

—¿Quién te dijo que salía? —Taehyung alzó la mirada para ver sus hermanos.

—Tus hermanos —los tritones miraron mal a su padre.

Desde aquel día Taehyung era más precavido con sus salidas para terminar yéndose con Jungkook, el vínculo entre los dos se hizo más fuerte. Jungkook estaba teniendo sentimientos con el sirenito más allá de la amistad que habían entablado con el paso de los días donde Jungkook tenía compañía, como esa noche donde Jeon estaba acomodando unos leños evitando que la fogata se apagara últimamente él se ocupaba de darle una cálida bienvenida a su amigo que lo visitaba en las noches, le era extraño que por los días Taehyung no se acercara por ahí. Pero por las noches eran recompensadas con la sola presencia del sirenito. Justo cuando terminaba de poner al fuego un par de pescados Taehyung apareció con su hermosa cola azul y la aleta de perlas preciosas incrustadas. Una pieza de ropa esperaba al tritón, una luz azul aparecía envolviendo de la cintura a los pies es donde Taehyung aprovechaba para ponerse la ropa. Platicaban de cosas sin sentido al final de su platica se quedaban serios.

—Taehyung, si un bote llega a por mí, ¿vendrías conmigo? —Jungkook preguntó serio.

Taehyung se quedó pensando.

—¿Por qué quieres que vaya contigo?

—No puedo dejarte solo, simplemente no me puedo ir dejándote aquí, algo en mí me diría que está mal —respondió sincero.

—Pero yo no soy como tú, yo soy un tritón.

Taehyung agachó la mirada.

—Entonces te llevaré a vivir a un lugar cercano al mar. ¿Irías conmigo?

Jungkook volteó a ver a Taehyung.

—¿Qué pasa si no voy? —los hermosos ojos de Taehyung en forma filosa lo miraron por una respuesta que lo complaciera.

—Te convenceré, realmente quiero volver a donde soy. Estoy acostumbrado a otras cosas, extraño la televisión...

—¿Televisión?

Las cosas en el mundo marino y el mundo terrestre era completamente distintas.

—Quiero enseñarte muchas cosas Taehyung, extraño tomar un café en la cafetería, leer un bien libro, mi vida cotidiana, incluso necesito escuchar música —la isla no le ofrecía los servicios a los que estaba acostumbrado.

—Escuchar música.... —el tritón comenzó a tararear un fino lalalá.

La voz de Taehyung era demasiado hechizante, ahora Jungkook entendía las leyendas donde los marineros se perdían por las voces de las sirenas. La voz de Taehyung era demasiado hermosa tanto que Jungkook se sentía en un lugar demasiado tranquilo como si estuviera en un lugar mágico. Taehyung seguía tarareando el lindo lalalá, tanto que Jungkook cayó embelesado frente a Kim, el sirenito era la cosa más hermosa que había visto. Tomó el rostro de Taehyung y juntó sus labios, el corazón del sirenito latió con fuerza entonces recordó las palabras de su padre Seokjin; cuando tu padre me besó por primera vez mi corazón latió con fuerza fue entonces que supe que tu papá era el indicado. No fue lo único que dijo sobre el enamoramiento que tuvo con Namjoon.