—Hola, amor— Joaquín sonrió al notar que el rizado había contestado su llamada; ayer habían tenido un tipo de pelea y temía que el rizado no quisiera contestarle.
—Joaquín— la sonrisa que antes había conseguido tembló sobre sus labios, al parecer Emilio seguía algo molesto.
—¿Qué tal dormiste?, ¿ya no te duele tanto la cabeza?— De alguna manera el menor esperaba mejorar las cosas en su relación. En ocasiones parecía que todo iba excelente, que todo pintaba color de rosa... pero al siguiente día o minutos después podría jurar que su piso temblaba y solo esperaba que nada se derrumbara sobre él.
—Dormí bien— Joaquín iba a contestarle que le alegraba que pudiera dormir mejor, hasta que escuchó las siguientes palabras provenientes del mayor. —Y el dolor de cabeza desapareció una vez te fuiste.
Oh... ¿Conocen ese dolor en el corazón cuando escuchan algo que los lastima?, bueno, es lo que Joaquín estaba sintiendo en esos momentos y una gran parte de él le decía que todo era su culpa, mientras que una pequeñita parte le decía que no tenía la culpa de nada, intentando recordarle que primero era él... pero hace tanto que dejo de escuchar a esa parte de él, tanto que cada vez se iba haciendo más y más chiquita.
— Oh, b-bueno— tragó el nudo que se comenzaba a formar en su garganta. — Me alegro de que durmieras mejor, a mí me costó algo de trabajo...
Fue interrumpido por el bufido de Emilio.
—¿Estás insinuando qué es mi culpa, que no duermas bien, Joaquín?— Se había enojado. Joaquín repasó toda la conversación que habían mantenido, desde el momento en que saludo al rizado hasta este momento, repasando cada una de sus palabras sin entender qué pudo haber dicho mal para que el rizado reaccionara de esa manera, ¿no fue amable?, tal vez fue el tono de voz que usó. —Venga Joaquín, contéstame chingada madre. Cuando te pregunto algo es para que me contestes.
— No, no, perdón— sus ojos comenzaban a inundarse con sus lágrimas. —Fue mi culpa no haber dormido bien, no podía acomodarme en mi cama y hacía algo de frío por la noche— comenzaba a divagar — No es tu culpa, Emi, lo siento.
—Ya me cansé de esta llamada, tengo cosas importantes que hacer y estoy perdiendo el tiempo aquí contigo— El castaño cerró sus ojos dejando caer una pequeña lágrima por su ojo izquierdo, solo estaba esperando el momento en que Emilio colgara. —Ah y Joaquín.— se limitó a modular un pequeño "mande", casi imperceptible. —Cuando estés listo para pedirme disculpas por lo de ayer, llámame.
Y colgó. Así, sin más, colgó. Después de unos segundos, Joaquín comenzó a llorar desconsoladamente, rodeándose a sí mismo con sus brazos para mantener todas sus piezas juntas y no caerse a pedazos.
🦋🦋🦋
Después de haber estado llorando por un largo rato y quedarse acostado bajo las cobijas de su cama, Joaquín había decidido tomar un baño, esperaba que eso le ayudará a calmarse un poco. Ya eran las 2 de la tarde, la llamada con Emilio había terminado aproximadamente hace 3 horas. Los ojos del chico estaban rojos e hinchados, le ardían, pero ese dolor no se comparaba al que estaba sintiendo en su corazón.
El timbre de su casa sonó, y al ser el único que se encontraba presente, se vio obligado a bajar las escaleras para dirigirse a la puerta de entrada.
—¡Ya voy!— habló un poquito más fuerte cuando el timbre sonó por segunda vez; su voz había salido algo áspera, era de esperarse después de haber estado llorando por un largo rato.
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SOUR | Emiliaco
FanfictionO.S. Emiliaco basados en las canciones del álbum SOUR de Olivia Rodrigo. 🦋 Ficción (Todo es obra de mi imaginación, no busco ofender a nadie) 🦋Pareja: Emiliaco (Puede que se haga mención de otras parejas secundarias) 🦋¿Lloraremos? puede ser...