Hogar

1.4K 208 45
                                    


Plotter se paró en medio de su sala del trono, mientras caminaba, los miles de kkomas les daban espacio para pasar. Poco a poco, Plotter se dirigió a la habitación que habían diseñado para su amor.

Las puertas fueron abiertas por un par de kkomas que se habían quedado dentro para ultimar detalles.

Todo era perfecto. Al menos eso pensaban ellos. Pronto tendrían la respuesta de su amada estrella.

Y allí, finalmente Dokja fue colocado en su cama.

Todos los kkomas y Plotter contuvieron la respiración por un momento.

En su mente solamente aparecía la frase "finalmente te tengo mi alma gemela".

  

Después de pasar un par de horas observando a Dokja descansar tranquilamente mientras se recuperaba de su ardua batalla anterior. Dokja finalmente abrió los ojos.

La habitación se llenó de un silencio absoluto mientras todos miraban la escena frente a ellos. Una escena que desearon todas sus vidas. Ver a su amada alma gemela despertando en su cama frente a ellos.

Por fin habían logrado cumplir su más eterno sueño.

  

Vieron como su amor se quedó momentáneamente quieta cuando abrió los ojos, para posteriormente frotarlos un par de veces. Luego un pequeño murmullo salió de sus labios.

-¿Esto es el cielo?- preguntó Dokja.

Ante tal pregunta todos pensaron al mismo tiempo sobre lo lindo que era su amor, sobre como esa cabecita que podía crear muchas estrategias, que para su desgracia casi siempre terminaban en su muerte, podía ser tan adorable.

Plotter acercó lentamente su mano para acariciar el rostro de su amor.

-Pienso lo mismo querido, esto parece el cielo- acarició más el hermoso rostro del joven frente a él, y luego volvió a hablar. -Pero no es así amor mío, estamos en casa, nuestra casa-

Plotter no podía creer que ahora, después de 1863 vidas llenas de tragedias y de luchas incontrolables, finalmente podía llamar hogar al lugar en donde a habitado por milenios, finalmente tenía a su amante con él, ahora este lugar es su hogar.

Vio como su amor parpadeaba con una mirada incrédula -¿Nuestra casa?, ¿Hogar?- pronto pequeñas lágrimas empezaron a caer. Plotter se puso nervioso, no sabía que hacer, nunca había consolado a alguien,pero su amor lo necesitaba. Él debía consolarlo. -Sí cariño, nuestra casa. Tu, yo y los kkomas-

Ante eso, Dokja se alejó de su abrazo y vio alrededor, por un momento había olvidado que habían muchos Joonghyuks chiquitos.

-Oh, mi Dios, minis Joonghyuks- dijo Dokja antes de salir de la cama y agarrar a los más cercanos. -Esto es el parai...-

Plotter rápidamente abrazó a Dokja, alejándolo de los kkomas. Sí, él estaba celoso, no lo negará.

-Yo soy Joonghyuk, puedes abrazarme a mí- dijo mientras hacía un leve puchero.

-Oh, Joonghyuk está haciendo pucheros- dijo Dokja antes de agarrar la cara de Plotter con ambas manos.- Mi lindo Joonghyuk-

Plotter quería negar lo de lindo y decir que Dokja era el lindo en la relación, pero antes de que saliera una palabra de su boca, sintió como Dokja había dejado un pequeño beso en su mejilla. Rápidamente un rubor se extendió en su rostro. Él se sentía tan feliz, su amado le había dicho cosas lindas y le había dado un beso en la mejilla el mismo día.

Pronto se encontraron hablando de la situación critica en la que se había envuelto Dokja, y que él tuvo que bajar a rescatarlo. Le dijo que muchas veces había querido rescatarlo pero que ningún escenario tendría la probabilidad suficiente para contenerlo, y que él sabía lo mucho que quería salvar a sus compañeros y al mundo, además de que si lo hubiera tocado antes, su cuerpo se podía destrozar debido a las diferencias de estatus entre ambos.

Hilo rojoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora