-Vista al pasado.

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Eran al rededor de las ocho de la noche,era un día especial para el moreno,bueno, era un día especial para Hunter también.

Era su aniversario número tres de noviazgo, y el rubio había reservado el piso más alto del restaurante para una cena romántica con su precioso pelinegro

Sus regalos hacia el Porter siempre eran así de extravagantes, el año pasado le regaló un departamento en el centro de la ciudad,muy lujoso a decir verdad, se mudo con él porque el castaño apenas podía pagar una tercera parte del alquiler de un mes con su salario completo.

Una excusa excelente para mudarse con él y pagar el 80% de todo si se lo preguntan al rubio.

El pelinegro estaba decidiendo que traje llevarse,todos se los había comprado el rubio, realmente tenía buen gusto.

- ¿Cuál me pongo? - le pregunto el Porter a su chico rubio, debatiéndose sobre un traje azul media noche o uno gris.

Su novio lo abrazo por atrás, susurrándole algo al Porter.

- Da igual lo que lleves, yo te lo voy a quitar precioso - susurro,dándole un beso en la mejilla.

Las mejillas del moreno se volvieron de un color rojo carmesí, el sonrojo le llegaba hasta las orejas.

- ¡P-ponte serio! - dijo el Porter, el rubio solo soltó una pequeña risita y apunto el traje azúl, el moreno sonrió y asintió, su chico tenía excelentes gustos en verdad. - ¿A qué hora te vistes? Vamos a llegar tarde - menciono el pelinegro tomando el traje,yéndose al baño a cambiarse de ropa.

- Ya voy - respondió simple el rubio, el pelinegro en el baño rodo los ojos,a veces su lindo rubio era algo inpuntual.

Estaba en ropa interior cuando el rubio abrió la puerta del baño y abrió,entrando sin preguntar.

- ¡Hunter! - regaño el moreno, el rubio solo río.

- Vamos,como si no te hubiera visto ya hasta sin ropa - dijo, el color en las mejillas del Porter se volvió intenso.

- B-basta ya - dijo, el rubio vio una excelente oportunidad para molestar un poco a su lindo novio.

- ¿Que? ¿Te da vergüenza? Pero si tuvimos sexo cuando nos conocimos - menciono sin pudor alguno.

- ¡Hunter! - regaño nuevamente,avergonzado.

- ¿Que? ¿Ya no te acuerdas amor? - el rubio se acercó lentamente hasta el moreno, abrazándolo por atrás desde la cintura,le encantaba la diferencia de altura que tenía con su novio, era tan lindo verlo molesto,se veía tierno. Se acercó a su oído, hablándole en susurro mientras sus manos recorrían lentamente su cuerpo - Gemias tan fuerte mi nombre pidiendo más mientras te cogía tan duro ¿Lo recuerdas? Pasamos toda la noche follando tanto, tus expresiones revelaban cuánto te gusta que te la meta y tus descarados gemidos sonaban en toda la habitación cuando nalgueaba tu culo tan apretado

El rostro del moreno estaba más rojo que nunca, sintiendo como las manos del rubio bajaban por su abdomen hasta llegar a su vientre bajo mientras que con sus labios succionaba suavemente su cuello.

- ¿Sabes? Es curioso que hasta después de una semana recordé que si nos presentamos esa noche,nos dijimos nuestros nombres pero,al día siguiente ni siquiera lo recordabamos - mencionó el rubio, dejando besos húmedos por el cuello de su novio.

- H-Hunter - jadeo bajo el Porter, el nombrado sonrió un poco y volteo al moreno,haciendo que quedarán de frente, lo cargo por los muslos y lo subió al mueble del lavamanos,para después juntar sus labios en un beso lujurioso,tan húmedo y excitante que el moreno no se pudo resistir a corresponderle. El Porter abrió las piernas para que el rubio se acomodara en medio, paso sus brazos por los hombros de su novio para juntarse aún más en aquel beso tan candente. Las manos del rubio se posaron en su cintura,bajando lentamente hasta su trasero,apretándolo un poco. - ¡Ah~! Hunter,v-vamos a llegar tarde - dijo jadeante el moreno, sintiendo como los besos de su novio bajaban hasta su cuello,dejando leves mordidas.

Night at the barDonde viven las historias. Descúbrelo ahora