Me encanta ir al parque, voy diario después de medio día, casi siempre está solo, así que camino por el césped con mi playlist favorita.
Y eso hice, saqué mis auriculares y tomé mi teléfono para poner la mejor canción.
¡¡PUM!!
—¡Auch! —
Sentí un golpe seco en la cara y caí de inmediato al suelo.
—¡Disculpame! ¡Fue un accidente!— Un chico preocupado aparecía frente a mí y me ayudaba a levantarme.
Aquel chico estaba sentado en una banca, y por espantar a las abejas este le había dado un golpe a una chica tonta (osea yo) que pasaba casualmente por ahi.
—¿Estás bien? ¿Quieres que te traiga hielo?— Seguía preguntando y yo sin darle una respuesta clara.
El chico frente a mí tenía los ojos más hermosos que he visto; claros, color miel. Y en su frente se posaba un mechón de su cabello, que era risado.
—Si… ¡Estoy bien no te preocupes!— Respondí nerviosa.
Al ver a mi lado, estaban mis auriculares en el suelo; los cuales se encontraban totalmente destruidos.
—¡Disculpame enserio!— Tomó los auriculares en sus manos y exclamó: —¡Te compraré otros! Serán mejores que estos—
—No es necesario—
Pero mis palabras fueron ignoradas, aquel chico tomó mi brazo y me dirigió al centro comercial más cercano.
Hicimos una parada en una tienda de electrónicos, allí él pidió los mejores auriculares de la tienda. Sin nisiquiera preguntar el precio dio su tarjeta al encargado y en un cerrar de ojos abrió la caja para colocarme los auriculares.
—Se ven demasiado costosos, no es necesario que hagas esto— Me los retiraba rápidamente.
—Tómalo como mis disculpas por el golpe— Sonrió.
Exclamó: —¡Se me olvidaba! Soy Oliver, es un gusto conocerte… ehm—
—¡Kiki! También es un gusto conocerte— Sonreí.
¿Oliver? Es un lindo nombre.
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En todas mis vidas
Romance(No es una típica historia de amor) Kiki Es una adolescente muy solitaria, así que mayormente esta con sus auriculares escuchando alguna canción, pero un día se topa con alguien, alguien que no debía estar ahí, quien le cambia la vida de un momento...
