El hombre más fuerte del mundo|| BNHA

Capítulo 1

Hola pendejos! Como están? Espero que mal, como sea, hoy empiezo con este nuevo fanfic que me he sacado de las nalgas , pero bueno, aquí está y espero con ansias que lo disfruten. Sin más dilación, empecemos.

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Él sonido de la campana que indica el final de la clase llego al salón de Izuku, él soltó un suspiro casi de inmediato , mientras buscaba con impaciencia una de sus libretas en su mochila, para poder anotar las cosas que se le ocurrieron durante la clase sobre los dones de sus héroes favoritos. Algo nervioso, el escribió más rápido de lo que debería. Después de todo, ese era un día importante.

Mientras estaba sentado, ensimismado en su actividad, uno de sus compañeros se le acerco amenazante, acompañado de dos alumnos más, tomó por la fuerza a izuku por el cuello de su camisa y lo levantó sobre el asiento.

—¿Que crees que estás haciendo? ¿Eh? Deku —escupió de manera intimidante, y lo miró con enfado mientras apretaba su agarre.

Los dos alumnos detrás de él soltaron una pequeña risa, uno de ellos tenía sus ojos salidos de sus cuencas mientras el otro tenía una apariencia similar a la de un reptil. El salón estaba vacío y como siempre, no habría nadie quien pudiese o quisiese ayudar a la indefensa víctima.

—Solo estoy escribiendo... —dijo mirando al suelo.

El enfado espontáneo del rubio no hizo más que aumentar, con su otra mano tomó la libreta y le dio una pequeña hojeada, después de eso soltó el agarre sobre el cuello de la camisa del peliverde y se hecho a reír a carcajadas, sus secuaces lo imitaron y rieron con él.

—Ya deberías saber que alguien que no tiene don no debería hacer estas cosas, solo alguien con un don puede ser un héroe —dijo de forma altanera, colocando la libreta entre las palmas de sus manos—. Déjame hacerte un favor —La libreta estallo en ese instante, hecho provocado por el don de katsuki, para luego ser lanzada al pupitre del peliverde.

Una vez más izuku midoriya había sido abusado por su amigo de la infancia Katsuki Bakugo y su séquito de buenos para nada. Para algunos este era unos de los días más importantes de sus vidas, para otros, como midoriya era solo un recordatorio cruel de su mala suerte.

Era bastante tarde cuando decidió al fin salir de la escuela, lo hacía a menudo para evitar ser golpeado en la salida. Él caminaba de regreso a su casa cabizbajo, deprimido y sin esperanzas para sí mismo, seguía adelante como se le permitía. Al llegar a casa, su amorosa madre, como de costumbre, lo recibió con un abrazo llena de emoción mientras lo saludaba, eufórica por su regreso.

—¿Como te fue cariño? —dijo con una sonrisa en su rostro

—Como de costumbre — replicó su hijo, no era fácil fingir felicidad todos los dias.

La expresión de su madre cambio, a una más triste, ella era consiente de la condición de su hijo y los tratos que él recibía a causa de esta, y le frustraba no poder hacer mucho para mejorar su situación.

—Las cosas mejorarán ya verás —dijo tratando de darle consuelo a su muchacho—. Entonces, que carrera vas a elegir ahora que vas a terminar el año.

Con lo último que sucedió izuku casi olvidaba el hecho de que ese día era su penúltimo día de escuela, al parecer ahora tenía que elegir a que dedicarse, y eso implicaba un montón de sentimientos incómodos para izuku. Él quería ser un héroe, pero no tenía un don.