Capítulo 6

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¿Katsuki habra tenido mas amigos despues de Izuku? Eso es un misterio para el peliverde, aunque las palabras de la madre del rubio le hacian creer a midoriya que es muy probable que la respuesta sea no.

—Te salve la vida hace unas horas, mate a un sujeto en el proceso, escape de la policía y ahora me escondo como una rata, ¡¿y lo primero que haces al llegar a tu casa es jugar al puto Mario Kart?! —A pesar de la calma con la que empezó a hablar a través del teléfono, su desconcierto fue muy evidente al final.

—Oh mierda, eres tu... ¿Quien carajo te dió mi número?

—¡Eso no importa ahora mismo maldita sea! —Tal vez hubiese sido mejor pedirle ayuda a la madre del rubio—. Escuchame, necesito que me ayudes, estoy... no se dónde estoy, pero tengo que volver a mi casa y no puedo hacerlo si todos en la ciudad me estan buscando.

—¿Y?

—¡¿Como que "Y" imbécil?! ¡Necesito que me ayudes!

Alzar su voz provoco que unas cuantas personas que pasaban por la calle se detuvieran a ver dentro del callejón donde se econtraba, Izuku los miro con nervios, pero para su buena suerte, lo ignoraron y siguieron su camino.

—Necesito que vengas por mi en el auto de tu mama. —continuó a través del teléfono, ahora susurrando.

—¿Por que haria eso? —respondio indiferente el rubio.

—Por que me lo debes, por supuesto.

Izuku le habia salvado la vida y si bien no es muy heroico pedir algo a cambio, no tenía muchas opciones.

—Yo no te debo nada de nada.

A Izuku no le sorprendió la respuesta de Katsuki, era obvio que a este tipo no le importaba nadie excepto él mismo, y la gratitud no era una virtud en el. Pero para esto, Izuku ya tenia un plan para persuadir al rubio.

—Ah muy bien —respondio—, entonces me asegurare de que tu mama se entere de que fue lo que paso con las cenizas de tu abuela.

Izuku pudo oir claramente el sonido de exaltación que solto su ex-amigo, habia dado en el clavo, como siempre.

—¡No tienes el valor! —grito, con su habitual tono maniático.

—Pruebame.

Esta nueva parte suya le estaba empezando a gustar. Su rostro mostró confianza por primera vez en toda su vida y aunque no estuviese nadie para verlo, era un buen primer paso para conseguir lo que queria.

—Entonces, ¿que dices?

El rubio suspiró derrotado desde el otro lado del teléfono, Izuku habia ganado por esta vez, pero el peliverde no dudaba que Katsuki encontraria alguna otra forma de molestarlo.

—Esta bien, supongamos que te ayudo; no podre usar el auto de la vieja bruja, estoy castigado.

—¿Cuando no estas castigado? —inquirio el peliverde—. Ingeniatelas, te voy a mandar mi ubicación por mensaje. No tardes o tu abuela te jalara los pies mientras duermes.

Izuku colgo, sin dejar responder a Katsuki. No tenian tiempo que perder, si estaba en lo correcto, su madre ya debio haber visto las noticias con toda la cara de él en ellas, si no daba señales de vida, se volveria loca e ir carcel seria la menor de sus preocupaciones.

—En que problema te has metido, Deku —se dijo a si mismo, mientras se sentaba en el suelo mojado, apoyando su espalda contra la pared del callejón.

Extendio su brazo hacia adelante abriendo su palma y entonces pudo ver con mas atención sus cicatrices, parecian rasguños irregulares y el no entendia el como se habían formado, que el sepa asi no funciona la cicatrización, a no ser que se haya lastimado y curado en el acto. Lo mas chistoso era que, hasta hace poco, él no las tenia, al menos no de esta forma, ¿Quemaduras? Claro, ¿Explosiones? Por supuesto, pero nunca habia quedado con alguna marca que le recordara alguna de ellas en específico. Si algún dia planeaba olvidar todo esto, esas marcas lo harian imposible.

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⏰ Última actualización: Aug 28, 2023 ⏰

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El hombre más fuerte del mundo|| BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora