Un diario para Lili

Diciembre 13

Ya han pasado dos semanas desde que fuí una de las elegidas para bailar en el festival de Navidad, llevamos tres horas en el escenario y llevo tres horas escuchando la misma canción aunque debo de admitir que me siento bien bailando y lo mejor es que tengo de pareja a Jennie.

— Haber, va de nuevo — habló Nayeon.
— Ya no quiero — respondió Jeongyeon tirándose al suelo del escenario.
— Solo una vez más, comprendan que debe quedar perfecto — pidió Nayeon ya desesperada.

Yo estaba con Jennie acostada en el escenario riéndonos de tonterías.

— ¿Entonces ya no quieres a Tae?
— Ya no, siento que solo estamos llenando vacíos y Chaeyoung dejó de hablarme desde que estoy con él
— Bueno, tampoco es como que tú y ella se llevaran muy bien — Jennie soltó una pequeña risa.
— Lo sé pero no me gusta estar mal con los demás.
— Bueno eso no importa, estás bien conmigo — Jennie me abrazó de la cintura mientras seguíamos acostadas.
— Claro, eres de las únicas personas que necesito.

Sentí como alguien estaba frente a nosotras.

— Lisa, tengo que decirte algo — era Chaeyoung.
— Dime.
— Vi a Tae dando besos en la mejilla a sus amigas cuando las saluda.
— No puedo hacer nada al respecto, son sus amigas, es como si yo le diera un beso a Jen en la mejilla — en eso, Jen juntó sus labios acercándose a mi.
— Aléjate, no lo haré — la empujé riendo.
— Ya quisieras — respondió Jennie.
— Bueno como sea, debes hablar con él... Es más, vamos ahora — me levantó tomándome del brazo y me llevó debajo del escenario.
— Taehyung, Lisa tiene algo que decirte — Chaeyoung le dirigió una mala mirada a Taehyung.
— ¿Qué sucede? — respondió él.
— Anda, dile.
— Chaeyoung te vió dando besos en la mejilla a tus amigas.
— ¿Y eso qué? ¿No puedo? — respondió alzando un poco la voz.
— Claro que sí, solo... No sé — bajé la mirada, no tenía el valor para terminar con él.
— Vamos Taehyung, todas sabemos lo idiota que eres con las mujeres — habló Chaeyoung riendo irónica.
— Eso no te incumbe — le respondió él.

En eso llegó Wendy, una de las mejores amigas de Tae. Sé que a ella le gusta desde hace tiempo, pero ni siquiera le importa coquetearle en mi cara.

— ¿Qué pasó V, no vienes? — preguntó ella abrazándolo de los hombros.
— Sí — suspiró y ella se fue — Hablaremos después ¿Ok? — dijo algo molesto.
— De acuerdo — respondí.

Realmente no hablamos de nada, terminaron las clases y pasó la noche, solo me dijeron sus amigas que había ido de fiesta con ellas, nunca hablé con él. Ya ha pasado una semana y hoy es el festival, estoy nerviosa porque no se cómo vaya a salir todo.

Lo ví hoy vestido de negro igual con su chaqueta de cuero negra, le asignaron tocar con su banda.

— ¡Faltan solo diez minutos para nuestro turno y estoy tan nerviosa, que tal si me juzgan por bailar tan mal! — dijo Jeongyeon entrando en pánico.
— Tranquila — le respondió Nayeon abrazándola.

Sentí que alguien tocó mi hombro, era él.

— Debemos hablar — dijo serio.
— Si claro, ¿Justo ahora? Por dios, no seas idiota, llevas una semana desaparecido y justo ahora te dignas a hablar. - contesté molesta.
— ¿Terminaste?.
— Sí, idiota — eso último lo dije bajo para que no escuchara.

Me llevó detrás del escenario y sus amigas me miraban riendo, sabía lo que iba a pasar.

— Debemos terminar.
— Ok — contesté tratando de no mostrar importancia aunque la verdad me dolía.
— ¿Solo eso dirás?.
— ¿Qué quieres que diga? ¿Gracias por haberme utilizado? No — respondí molesta.
— Bueno, de todos modos te engañé en la fiesta — lo dijo con tono hiriente.
— ¡Excelente! Bueno ahora debo irme, fue un... Placer.