¿Confianza?

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Despertó lentamente, estaba desorientado, sus recuerdos estaban borrosos. Pasó la mirada por los alrededores, ya recordaba, era el laboratorio de epictale, claro, lo había estampado contra la pared y terminó inconsciente. Revisó si estaba herido, no era más que dolor muscular, se estiró un poco y chocó con algo, ¿una pared? Cayó en cuenta que estaba en un frasco, nada que lo pudiera detener.
Atravesó el cristal con sus tentáculos y salió de un salto fácilmente, por todo este lío ahora tenía hambre, necesitaba un huésped y unas almas.

–No me sorprende que salieras de ahí.–

Ahí estaba el causante de todo, Epic, se confío, pensó que lo tenía ganado y terminó perdiendo. Que ganas tenía de devorar su alma, no pensaba en jugar con él ni darle tiempo a correr, lo quería muerto ahí mismo.

–No me mires así, bruh.–

Epic se cubrió con sus brazos como si estuviera desnudo y Fresh le anduviese viendo algo.

–Pareciera que me quieres comer... Ouh.–

El parasito se movió rápida y ágilmente hacia el esqueleto, el cual reaccionó saltando y agarrándose a algún mueble alto.

–¡AAAAH! ¡Mamiiii! Me la quieren chupar, pero no la pistola.–

Saltaba de un lado a otro evitando los tentáculos, los muebles caían dejando todo objeto desparramado en el suelo; por suerte, no había nada de vital importancia en la habitación.

–Bruh, solo quiero hablar, ¿por qué no mejor nos sentamos y discutimos esto de esqueleto a parasito?–

El parasito se perdía con tanta cosa por el suelo, lo próximo que supo de él es que estaba mordiéndole la mano, no pregunten como es posible, nadie sabe.

–Fuck, Bruh!–

Se sacudió la mano tratando de que soltara, pero solo le acababa doliendo de más.

–¡Suelta, bruh!¡No sabía que tenías complejo de perro!–

Finalmente le soltó, el parasito salió volando, pero acabó ileso sobre todo el desorden. Se quedaron mirando, a Fresh aún se le notaba el enojo y Epic se sobaba la mano afectada.

–Espero que te hayas vacunado contra la rabia... Ejem, te me relajas, bruh. No tengo intensiones de lastimarte, sino ya lo habría hecho.–

Aún así el parasito no bajó la guardia, Epic le restó importancia a todo lo que acababa de pasar, sacó una paleta de uno de sus bolsillos y se lo llevó a la boca, como a Fresh no se le quitaba la cara de querer comérselo, le ofreció de su paletita.

–¿No quieres? Tiene algo de saliva, pero está casi sin chupar, bruh.–

Movió sus cejas coqueto, pero no al ver reacción alguna, simplemente se carcajeo un poco y le hizo señas para que le siguiera.

–C'mon, bruh, vamos a ver si tu amiguin ya despertó.–

Eso le interesó a Fresh, sin más que hacer  lo terminó siguiendo por unos pasillos que ni había visto, ¿qué tan grande era ese sitio? Quizás ni siquiera estaba en el edificio de siempre y este era el verdadero laboratorio.

–No te vayan a pisar, ven, sube bruh.–

Se detuvieron, Epic se inclino para extender una mano a Fresh, ¿entonces había más gente ahí? definitivamente no era la casa de ese esqueleto. Hubo un momento de silencio junto a un choque de miradas, se podría decir que iban a discutir otra vez, sin embargo, Fresh aceptó el aventón.

–Ya nos estamos entendiendo, bruh.–

El parasito terminó en su hombro, transportándolo entre los pasillos, se cruzaban con algunos monstruos que saludaban con algún gesto y estos se les quedaban mirando, más específicamente al parasito.

[...]

–Aún no despierta, pero puedes ver que está en perfectas condiciones... Bueno tampoco así, le hice algunas pruebas y, bruh, casi drenas toda su energía vital, en conclusión, estás a punto de hacer que estire la pata.–

Eso a Fresh le valía madres, simplemente ignoró todo lo que tuviera que decir el Épico y se le bajó a por su cuerpo, sabía desde antes que ya iba siendo hora de cambiarlo, nada más salir de allí lo haría.
Ya siendo él, estiró los huesos y los hizo tronar, revisó que no le faltara nada, se aseguró de tener sus lentes y se levantó de un salto creando un portal.

–No fue una agradable visita, brah, eres un pésimo anfitrión, tron.–

–Es que nunca tengo visitas, bruh.–

Dramatizó cubriéndose el rostro y por sobre sus manos se manifestó un sonrojo morado, supuestamente estaba avergonzado.

–Anyway hemingway, me piro vampiro.–

–Wait, bruh! Ven mañana, porfis~ Solo para hablar, pacíficamente, lo juro por mi madrecita santa.–

Un ultimo choque de miradas y luego solo hubo una nube de colores, Fresh se había ido.

[...]

Es por la Ciencia [FreshEpic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora