creo que ya te sabes el comienzo de esta historia eh? donde una pequeña niña campesina se convierte en princesa y cada una de sus aventuras siendo parte de la realeza con su amuleto mágico no?
que te digo que esto no termino aun y su pequeña hist...
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Había sido una sorpresa el genio de la joven.
Pues a lo que le explico Mimi, ahora era aun mas sensible que antes como irritable, todo debido al embarazo.
y a palabras de Mitny, simplemente se sintió al ver que el rubio solo la saludo a ella y no al bebé también, entendiendo que lo rechazaba como hijo y eso lastimándola profundamente.
Aunque tanto cómico como banal, ahora estaban en el jardín hablando sobre la situación de Sofía.
-Así que ustedes ya sabían....- dijo pensativo James mirando hacia la pelinegra que solo jugaba con las flores sentada en una manta y dejando que le diera el sol.
-Si su majestad, quien nos informo fue el joven Cedric- Dijo Mimi igual de seria y mirando a la joven princesa.
-¿Cedric?- se giro violentamente hacia la albina quien comprendió que ahora la miraba directamente -¿El sabía sobre el compromiso y no dijo nada?- se lleno de rabia inmediata apretando los puños
-¿Hablan de Cedric?- llego la azabache preocupada donde ellos- No te enojes con él James, yo se lo saque a la fuerza ...- se puso delante de el rubio intentando cambiarlo de humor este solo la miro aun con enojo.
-¿Cuando? ¿Desde cuando saben?- dijo con voz quebrada intentando que el enojo no se apoderara de el ni menos las ganas de llorar.
-Fue antes de la segunda fiesta para el compromiso de Amber- se mordió el labio inferior sin saber si había ya dicho demasiado- pero no importa eso, lo importante ahora es impedirlo, nuestros esfuerzos por juntarlos no serán en vano-
lo miro decidida poniendo en puño ambas manos dando una señal de fortaleza.
-Tienes razón... perdón, es que no se que pensar, son tantas cosas ese ese compromiso, nosotros... nuestro hijo- se acerco suavemente con ternura acariciando su cara como apoyando la otra mano en su vientre.
Los ojos de Mitny se cristalizaron y mas rápido había sido que volviera a llorar que los brazos que la rodearon pidiéndole disculpas por hacerla llorar de nuevo.
Estaba preocupada, por lo que sabia todo en el palacio de Enchanthia era un caos y que por suerte Sofía no se encontraba.
Recordaba los ojos preocupados de aquel hechicero ese día.
Caminaba buscando a James para entrenar juntos como acostumbraban, las luces proveniente de las ventanas brillaban hermosamente si no fuera por que de dirección contraria venia su amigo de cabello blanco y negro de una forma tan... preocupada.
-¡Caballero Cedric! ¿Cómo esta?- saludo de forma entusiasta y feliz sonriéndole.
-Princesa... perdón no puedo hablar ahora- se veía tan apagado que la joven se preocupo sabía que era amargado pero verlo tan triste no era común.
