El juego que nunca termina

(Son croquetas de mamá)

-despierta Irene, que vas a llegar tarde, y no puedes llegar tarde al aeropuerto- dice mi madre subiendo las persianas de mi habitación mientras que todavía no puedo ni abrir los ojos de lo cansada que estoy.

Miro mi reloj y veo que son las 6:30 de la mañana -pero mamá, es muy pronto todavía, déjame 15 minutos mas porfa- digo yo con un sueño insoportable.
-no hay tiempo para eso, te tienes un duchar, vestirte y mas cosas, venga, levanta de la cama y ala ducha- dice mi madre.

Mientras que me ducho, pienso en todo lo que voy a poder hacer en Barcelona, que es adonde me voy ya que he encontrado una compañía de musica que quiere colaborar conmigo para hacer unas canciones. Cuando me contactó esa compañía y vi que estaba en Barcelona, no me hacía mucha gracia mudarme a Barcelona cuando casi toda mi familia está en Tenerife, pero por otra parte, mi hermano mayor, Pedri, está viviendo ahí y no le he visto en mucho tiempo.
-VENGA IRENE, VISTETÉ QUE NOS VAMOS EN 10 MINUTOS- grita mi madre desde la cocina. -QUE SIIIII- digo alargando la i en un tono molesta.

7 minutos mas tarde ya estoy bajando las escaleras a la cocina con mi maleta y mis bolsas para el avión.
-venga irene, vete entrando al coche que te he metido el desayuno en una bolsa- dice mi padre dandomé una bolsa que huele mucho a crepes, mi desayuno favorito. -gracias papa- le dig dándole un beso en la mejilla.

-te voy a echar mucho de menos pajarillo- dice mi padre dándome un abrazo. -yo más todavía, ¿a quien voy a chinchar ahora si no estás tu?- dice mi hermano Fernando uniéndose al abrazo. -Me estáis asfixiando chicos- digo escapándome el abrazo y entrando al coche. -yo también os echaré de menos chicos- dio al entrar al coche con mi madre.

El camino al aeropuerto mi madre y yo no dijimos nada ni hablamos sobre nada, mi relación con ella es un poco rara, cuando nos enfadamos, nos podemos quedar sin hablar semanas, incluso meses en situaciones muy malas, como esta. -ya estamos- dice mi madre -Irene, quiero que sepas que yo te perdono por todo y quiero que te lo pases muy bien con Pedri en Barcelona, y por favor, se responsable y no le des mucho la lata a Pedri- me dice cogiéndome de la mano a lo a mi me hace que quite mi mano de donde estaba. -vale- respondo a secas, sé que esta es la última vez que le vaya a ver en mucho tiempo, pero sigo enfada con ella desde que me traje un chico a casa sin su permiso.

-chao- digo saliéndome del coche y al coger mis maletas del maletero.

Menos mal que he llegado con 2 horas antes al aeropuerto porque a mi se me da fatal encontrar cualquier cosa en cualquier sitio, pero esta vez, pasé todo super bien y llegué a la puerta de embarque 45 minutos antes de que saliera el avión, lo que me daba tiempo a que me comiese mi desayuno. Cuando abro la bolsa, veo unos crepes con un plátano con una nota: "esto es para tí pajarillo, lo que está en el tapper es para tu hermano ;) (son croquetas de mamá)". me rio un poco ante esa nota ya que las croquetas de mamá es su comida favorita.

-Pasajeros del vuelo 6353 de Iberia, por favor id a la puerta J33 para embarcar- escucho por los altavoces del aeropuerto, causándome que me levante y me ponga en la cola para embarcar.