El juego que nunca termina

Ni a mi

*narra Gavi*

La beso.

No se porqué la he besado exactamente, pero ella no parece rechistar, vale, he decidido, me gusta Irene.
Después de unos segundos, ese beso lo convierte Irene en un lío, lo cual yo tampoco voy a quejarme.

-espero que te guste ese regalo- digo después de separar lentamente de ella y se la ve con una cara de 'que acaba de pasar?'

-luego nos vemos- la guiño el ojo y me voy a mi habitación a comprender lo que ha pasado estos 5 últimos minutos con irene.

*narra Irene*

Que. Acaba. De. Pasar. ?.

Aver, que cojones ha pasado. Gavi entra a mi habitación, Gavi bromea con migo, Gavi me da su regalo, nos acercamos los dos, Gavi me besa, yo me lío con Gavi, Gavi se lía conmigo, y luego... se... va?

No sé que hacer, me voy a morir en este mismo momento. Me tumbo en la cama y me tapo mi cara con la almohada, y grito, pero la almohada hace que no se escuche mi grito de desesperación.

Justo escucho a alguien entrar a mi habitación

-gavi?- pregunto levantándome por completo

-que gavi ni que coñas?- pregunta mi hermano con cara de molesto y sorprendido

-nada, nada- digo yo, un poco decepcionada de que no haya sido el

-hablando de Gavi...- dice mi hermano sentándose al lado mio en la cama

-he visto como te ha mirado en el campo cuando estábamos entrenando, y escúchame bien con esta parte- me dice seriamente. -cuando gavi te ve, su sonrisa se le hace más grande, lo cual me hace pensar que le gustas, no sé si es así o no, eso ya lo averiguaré yo, pero no quiero que os acerquéis mucho. No lo digo por mi, lo digo por vosotros, os conozco muy bien a los dos y sé que sois muy capaz de haceos mucho daño cada uno al otro-

Mientras que me está diciendo eso, no sé por que, se me escapa una lágrima. Dos. Tres. Cuatro.

Lo único que puedo hacer es abrazarle, demasiado tiempo.

-peque- me dice separándose de mi -estás bien?- me pregunta preocupado

-Sisi, no te preocupes- digo quitándome las lágrimas de la cara. -ya sabes cómo soy, lloro por todo- digo sonriéndome y mi hermano se une. -tienes razón ire-

-bueno, me voy al gimnasio un poquito, en un par de horas vuelvo- me dice mi hermano medio chuleando

-vale, y yo me voy al salón con un helado y ver una peli- el me mira con cara de celos, y yo le respondo con una sonrisa angelical.

Cuando Pedri se va, prefiero echarme una siesta, intenté dormirme, pero no pude, y ya sabía yo porqué era. Pero en cuanto me puse la camiseta que me regaló Pablo, caí dormida al segundo.

Lo que creo que fueron horas después basado en el sueño que no tengo, abro los ojos.
No estoy yo sola en esta habitación, hay alguien más. Iba a preguntarle a Pablo que estaba haciendo aquí, pero se le veía tan adorable y dormido, que decidí coger mi móvil sin moverme, ya que tiene sus manos rodeadas por mi cintura.

-buenos días princesa- me dice pablo en un tono de dormido

Yo me doy la vuelta para al hablar con el le pueda ver

-sabes bastante bien que no son buenos días, sería buenas tardes pablete- le digo en un intento de vacilarle

Pablo se levanta se repente

-cuántas veces te he dicho que no me llames Pablito o pablete- me dice con una sonrisa y atacándome a cosquillas.

Yo solo me puedo reír

-Ga-gavi, para porfa- le intento decir entre risas que no quiero

-como me llamo?- me dice pablo, parando las conquillas un pequeño rato

-te llamas Pablo Martin Páez Gavira- le digo bromeando. -como me llamo yo?-

-tu- me dice acercándose a mi -te llamas mia cuando tu hermano no está por aquí, cuando tu hermano está por aquí, te llamas irene o dinosaurio-

Casi me muero de la risa

-dinosaurio? Por que?-

-no sé, ha sido, la primera cosa que se me ha ocurrido.

-anda, que majo, así que para clarar, cuando estamos solos me llamo mia y cuando está mi hermano dinosaurio-

Noto que Gavi no me está prestando atención, pero si que me está mirando a mis labios, y se me ocurre una idea.

Me acerco más a él y Pablito hace lo mismo, pero cuanto él estaba apunto de besarme, apartó la cabeza disimuladamente y digo

-oye, que hora es?- intento decir sin morirme a carcajadas al ver su cara de enfadica y triste de lo que le he hecho.

-así es como va a ser?- me pregunta pablo bromeando con una sonrisa malvada.

Yo solo asiento con la cabeza, me da miedo de lo que es capaz de hacer este chico con mis sentimientos.

-el juego ha empezando- dice Gavi

-algo me da a mi de que este juego no va a terminar, por que, te aviso, a mi no me gusta perder- le digo sonriendo

-ni a mi.