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5:00 am...
5:30 am...
6:00 am...
- ¡Puta madre, cállate!- Gritó el chico con molestia a la alarma como si pudiese escucharlo, harto de haberla apagado lo que parecían haber sido millones de veces.

Se levantó de mala gana pero incluso su mal humor se fué cuando se percató de la hora: 6:47, cuando se supone que él entraba a las 7:00, así que tomó la ducha más rápida de su vida, se cambió y salió corriendo sin al menos revisar si tenía las materias correctas en la mochila.

Vivir solo no era tan fácil, ¿Cuándo su madre le había dado la confianza a él, Inosuke Hashibira de vivir solo mientras ella se iba de la ciudad un mes? Incluso él sabía que eso no se le estaba dando muy bien, pero claro, no lo quería admitir.

Por obras del destino logró llegar a tiempo, bueno, diez minutos tarde pero vió personas fuera de su salón por lo que supuso que su profesor aún no había llegado, sin embargo no alcanzó a bajar su velocidad y terminó chocando con alguien, se golpeó la cabeza pero se levantó lo más rápido posible, mareandose en el proceso.

- ¡Oye tú imbécil de mierda!- El de cabello blanco detuvo sus insultos al ver a una chica de cabello oscuro y teñido de azul en las puntas, algo linda aunque se veía algo..¿Molesta?- Discúlpame, eh, no sé tu nombre en realidad, lo siento señorita.- Aunque estaba molesto por eso no se iba a molestar por un accidente y menos con una chica menor que él además de lo que parecía ser "indefensa". Se levantó y estaba a punto de preguntarle si estaba bien pero vió la cara de su "contraria" y se detuvo.

...

¿Qué?

¿Ese inútil acababa de llamarlo "señorita"?

Una vena de rabia se formó en su frente, ¿Qué estaba ciego y no veía que traía puesto el uniforme masculino?

- ¡¿Acaso me ves cara de mujer puto imbécil?!

Bueno, al menos su voz no se escuchaba nada femenina.

Sanemi, el chico, se quedó quieto sin decir nada unos segundos, sin embargo, al notar que el tipo era hombre, lo chocó y luego lo insultó no pudo evitar molestarse bastante.

- ¡¿A quién le dices imbécil idiota?! ¡¿Quién putas sabría que no eres mujer si eres igual a una?!- Gritó tomando del cuello de la camisa a Inosuke.

Rengoku, un amigo de Sanemi, quiso reír un poco por el repentino cambio de actitud en su amigo, pero ahora estaba preocupado por lo que fuera a suceder, y él claramente no se quería meter, la última vez no le había ido muy bien.

Inosuke claro que iba a golpearlo, claro luego de su grandiosa confusión y más encima atreverse a gritarle así, le soltó unos cuantos insultos más y cuando ambos se iban a golpear alguien los detuvo.

- ¡Oigan ustedes dos! ¿Piensan que este es un callejón?- Gritó un profesor acelerando el paso hacia ellos.

¿Justo ahora se le ocurre llegar, no pudo cinco minutos antes?

Toda la gente que se había reunido para observar la pelea se había disuelto rápidamente, dejando a los dos chicos solos.

Inosuke no observó a ninguno de sus amigos, por lo que asumió que se habían saltado la primera clase del día. Era raro, casi siempre era él el que los convencía para ese tipo de cosas.

Regresando a el problema que tenía con cierto inútil, ahora estaba siendo arrastrado por su profesor a la dirección, en dónde ya había estado un sin fin de veces.

- Director, sé que es bastante temprano pero usted sabe, Hashibira se mete con la gente desde temprano y ahora también resulta que con los de nuevo ingreso.

¡Que no soy una maldita mujer!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora