HUNTER

<<𝙵𝚛𝚒𝚎𝚗𝚍𝚜>>

-1-37- Informó la rubia al salir de la habitación en la que estaba encerrada con un fantasma.

-¿Qué es eso?- Habló confuso el novio de la chica.

-Una habitación- Contestaron ambos hermanos a la misma par mirándose el uno al otro. Dean pensó que la castaña estaría allí, pero al notar su ausencia frunció el ceño. 

Hasta donde su memoria llegaba, se había ido junto con Sam pero su hermano había vuelto sin ella. Sintió una extraña presión el pecho al no saber nada.

-¿Dónde está?

Sam supo rápidamente a lo que se refería, así que bajó la cabeza. Ni siquiera él mismo podía decir lo que había pasado. Suspiró negando, haciendo que su hermano mayor temiese. Miles de cosas pasaban por su cabeza en ese momento. Se sentía asustado en ese momento, preocupado, furioso. 

-¿Cómo pudiste perderla? 

-No fue su culpa- Habló Gavin defendiendo al menor- Una mano la agarró del pie y se la llevó. 

-¿Visteis algo? ¿Quién fue? ¿A dónde la llevó?- Su tono de voz sonaba desesperado e inquieto. 

-Creo que tengo una corazonada de dónde puede estar. En la habitación 1-37. Dean asintió mirando a Sam, ambos sabían que si se la habían llevado, lo más seguro es que estuviera en esa habitación.

-Sácalos de aquí, Sam- Le ordenó- Yo iré a por ella.

Sam a duras penas asintió, él no quería salir de allí sin su amiga. Quería encontrarla y disculparse por no haberla ayudado cuando debió hacerlo, por no evitar que se la llevaran. Se sentía culpable, no lo negaría. Debió protegerla, en cambio, dejó que se la llevaran.

Dean caminó en solitario por el hospital, buscando no sólo la habitación, sino también a la castaña. Se culpaba por haberla mandado con su hermano y no ir con ella. Había pensado que si iba con Sam, lo más probable es que no corriera tanto peligro, pero se había equivocado, todo había salido mal. La había perdido y debía encontrarla.

Una vez encontró la habitación, cerró los ojos y deseó que realmente estuviera allí. Quería deshacerse de esa agonía desesperada.

Al abrir la puerta lentamente, preparado para cualquier cosa, la vio, tumbada en el suelo inconsciente y con una pequeña herida sangrante en su frente. Corrió hacia ella para ayudarla, se agachó a su lado, moviéndola de los hombros, sacudiéndola levemente. Comenzó a llamarla varias veces, su desesperación aumentaba. 

Mae abrió los ojos asustada con su respiración agitada. Al ver a Dean, lo primero que hizo sin pensarlo fue lanzarse a sus brazos, sorprendiéndolo, sorprendiéndose y sorprendiendo a sus diablos internos. Acababa de hacer que jamás pensaría hacer, abrazar y sentirse agradecida con la persona que quería matar.

Quería, en pasado, porque algo le pedía que dejase de lado la venganza.

-¿Estás bien?

Ella simplemente asintió separándose de él. Con dificultad se levantó y Dean la ayudó al ver cómo se tambaleaba. 

-¿Qué pasó?- Inquirió.

-Algo me agarró del pie y me arrastró hasta aquí... Me golpeé la cabeza la cabeza en el proceso y, el resto ya lo sabes- Dijo mirando a su alrededor.

Dean caminó hasta unas tablas en la pared, consiguiendo abrirlas.

-Por esta razón soy yo el que más cobra- Me informó Dean sacando un libro de unos tablones.