Soy Aurora, La Hermana de la 'Niña Que Vivió'

6

Detención. Vinculación. Y lecciones de Quidditch.

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De acuerdo, tal vez fue una mala idea faltar a clase.

Por desgracia tanto para mí como para Christine, Susan y Granger, mi madre no fue muy misericordiosa aquel día, probablemente todavía estaba resentida por lo ocurrido en el gran comedor. Nos asignó castigos con nuestros jefes de casa y nos quitó puntos aunque Granger explicó que era culpa suya que nos hubiéramos saltado las clases. Lo cual, técnicamente, era culpa suya. Pero mi querida madre, siendo la maravillosa madre que era, quería vengarse.

Pero como la profesora Sprouts y el profesor Flitwick estaban ocupados, le pidieron al profesor Black que se hiciera cargo de nuestro castigo y él aceptó.

Y es fue la razón por la que nos dirigíamos a las mazmorras en este momento.

"¡Esto es ridículo!''. Christine se quejó. "¿¡Ayudamos a un estudiante y nos dan detención!? ¿¡En serio!?".

"Nos saltamos la clase Christine". Le recordó Susan.

"¡Sí! Para ayudar a un estudiante". Dijo exasperada.

"Hablando de dicho estudiante". Me volví hacia Granger. "¿Cómo estás? ¿Han surtido efecto mis palabras? Si lo hicieron, estamos dispuestas a ayudarte a patear algunos traseros".

"¡Por el amor de Merlín, Aurora!''. Christine me miró fijamente. "¡Deja a la niña en paz!".

Me encogí de hombros con indiferencia. "No la estoy molestando, así que por favor, no pongas tu estrés en mí".

Parecía que Christine estaba lista para saltar sobre mí y destrozarme, pero Granger vino al rescate.

"Aurora tiene razón". Dijo en voz baja. "Estoy cansada de ser ridiculizada. Podría haberlo permitido en casa, pero no lo haré aquí. Les mostraré a esos puristas de la sangre que una "sangre sucia" como yo puede ser mucho mejor que ellos. Seré mejor que ellos".

Sonreí ampliamente. "¡Ése es el espíritu chica!. Y si todavía quieres esa venganza, dímelo, tengo algunas ideas guardadas en mi cabeza".

"¡Aurora!". Susan se quejó.

"Tiene razón". Christine asintió. "Hay que darles una lección a esas zorras".

"¡Guau! ¿De dónde vino eso?".

"¡Ya llegamos!". dijo Susan rápidamente, probablemente harta de nuestra conversión.

"Adelante". La suave voz del profesor Black llegó desde el otro lado, incluso antes de que Susan llamara. Nos dimos una mirada confundida, pero finalmente nos encogimos de hombros.

"Ah, señorita Granger, señorita Theall, señorita Bones y señorita Potter, ¿Detención en su primer día de clases? Tengo que decir que es todo un récord''. Se rio entre dientes y nos hizo un gesto para que entremos. "Todas ustedes van a escribir líneas". Todas nos quejamos de esto. ''Sí, sí, tuve la misma reacción en mi primera vez, pero te aseguro que es mejor que fregar vasos, créanme. Ustedes cuatro tienen mucha suerte de que Severus no fuera su supervisor, no habrían sobrevivido a la noche". Se rio de nuevo mientras hacía magia en cuatro pergaminos frente a nosotros con plumas y botellas de tinta.

"¿Qué estaremos escribiendo, señor?". Preguntó Granger.

''¡Oh! Déjame adivinar, ''Nunca más faltes a clases''. Dije rápidamente con una sonrisa inocente. El profesor Black levantó una ceja y me miró como si supiera exactamente lo que estaba haciendo, pero yo seguí con mi sonrisa inocente.