꒰ ᜊ capítulo 11 ꒱

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Todo había sucedido muy rápido, el tiempo era tan presente y a la vez tan inadvertido. La imagen del vidrio roto frente a él y la sangre le hicieron sentir su corazón parar por un segundo.    
                
De las dos camionetas salieron tres grupos de alfas, el olor amenazante de sus feromonas lo marearon y Jungkook apenas pudo respirar cuando vió a uno de los hombres acercársele con una pistola en mano.   
                   
Quiso correr pero sus piernas se negaban a responder. Estaba rodeado y todos los alfas iban armados, apenas diera un paso tendría miles de hoyos en el cuerpo. El miedo inundó todo su cuerpo.   
                
La aproximación del alfa se vió interrumpida cuando una bala lo impactó. El castaño pudo ver perfectamente cómo la bala le perforó el cráneo.    
                
Sus oídos zumbaron y escucho unas voces cercanas decir una y otra vez "hürrem". Era la primera vez que se sintió aliviado de escuchar ese nombre.   
                   
De un momento a otro se encontraba en medio de un fuego de balas. Su primer instinto fue agacharse y recargarse junto al auto del chofer que murió ante sus ojos. Cerró los ojos con fuerza esperando que todo fuera un sueño.   
            
—¡Hürrem, hürrem!—escucha cerca, sintiendo su cuerpo siendo sacudido. Era Eunwoo, su rostro siempre tranquilo ahora estaba marcado por el aura amenazante de un alfa peleando. Jungkook pudo ver sangre fresca en la mejilla del brasileño, y una mancha aún más grande de carmesí en su brazo derecho.—¿Se encuentra bien?...¡Hürrem reaccione!   
                   
Aún seguía escuchando las balas sonar y el impacto de cuerpo contra cuerpo. Quería contestar pero la sangre en Eunwoo y los gritos de pelea a su alrededor hizo que tuviera ganas de vomitar, obligando a sus extremidades a estar como estatuas en su lugar.   
               
Eunwoo al ver que no tenía respuesta sacudió con más fuerza al omega, al punto de que si estuvieran en otra situación probablemente sería castigado por tratar así al castaño—¡Jungkook!   
                
La voz del alfa y el nombre que en esos días no había escuchado hicieron que el cerebro de Jungkook volviera a trabajar.   
                   
— E-Eunwoo —murmura Jungkook asustado. El moreno sonríe aliviado y lo sostiene más fuerte.   
                
—Si, soy yo hürrem —Eunwoo trata de calmar al castaño con sus feromonas, pero no funcionarían tan bien al ser un omega marcado así que decide apresurarse a explicarle—. Escucha, tenemos que sacarte de aquí, solo tenemos una oportunidad. Nos cubrirán y podremos subir al auto que traerá mi compañero. Necesito que seas rápido.   
                   
Jungkook niega frenéticamente, era prácticamente imposible salir de ahí sin que las balas los atravesaran—No Eunwoo nos...   
                   
—Lo protegeremos hürrem, no dejaremos que le pase nada. Te protegeré, lo prometo —interrumpe el alfa antes de que otro ataque de ansiedad inundara al omega.—¿Puedes confiar?   
                 
El castaño cierra los ojos y respira profundamente. Puede hacerlo, tiene que dejar su miedo a un lado si quiere vivir un poco más.
No tiene nada que decir cuando Eunwoo interpreta su mirada, así que en un pestañeo siente el brazo del alfa rodearlo, impulsándolos fuera del escudo que el taxi les proporcionaba.   
                 
Intenta ignorar los jadeos de dolor y el olor de la sangre. Puede ver a Tristán, el alfa rubio del que no recordaba su nombre apresurarse a ellos en uno de los buggati en los que llegaron a la plaza. Jungkook juró que nunca volvería a olvidarlo.   
             
De su izquierda un alfa que no reconoció se lanzó a atacarlo, pero antes de que pudiera hacerlo Eunwoo se adelantó sacando una daga, clavándosela expertamente en el ojo. El omega inmediatamente apartó la mirada.   
             
Se acercaron otros hombres con la misma intención que el otro y Jungkook contó los segundos de su vida. Eran demasiados, Eunwoo no podría con todos.   
                                           
Vio una ráfaga que sus ojos apenas captaron, era  el buggati dando contra ellos, lanzándolos a dos metros con un impacto que los resultaría muertos. La mano de Eunwoo lo sostuvo y escuchó el sonido de un disparo cercano.   

𝐌𝐚𝐟𝐢𝐚 𝐑𝐨𝐣𝐚 ᵀᵃᵉᵏᵒᵒᵏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora