•You're mine, ¡AND ONLY MINE!●*Creek*

#[02] "¡Déjalo en paz!"

     El sol salió detrás de las altas y nevadas montañas de South Park Colorado. Entró sin permiso a la habitación de un azabache ojiolivo, despertandolo. Se levantó con pereza y se alistó para dirijirse al colegio, luego se sentó con su familia en la mesa a desayunar mientras miraba a los nada, deseando no haber nacido.

    Mientras el azabache caminaba con sus manos en los bolsillos por las frías calles de South Park, notó que alguien más iba por ahí. Su corazón latía fuertemente y sus ojos se sólo se sentraban en ese chico que iba en el otro lado de la calle. Era el mismo chico de la otra vez. Recuerdos de aquel accidental beso y de esos ojos tan lindos hacían que su corazón quisiera explotar.

    En cuanto se dió cuenta que iba en la misma dirección que el rubio sentía cómo sus mejillas se sonrojaron de una forma leve.

— Hola. ¿Tweek cierto?— empezó la conversación asustando al contrario que iba distraído dándole un fuerte golpe en el estómago al azabache.

—¡Oh Jesús!, Ngh ¡ Lo siento! — exclamó luego de haberlo golpeado.

   El ojiolivo soltó una pequeña risa para luego ver a Tweek con una sonrisa.

—No te preocupes, me halaga recibir un golpe tuyo— dijo a lo que el rubio lo miró extrañado.

—umm... B-bien — siguió casi murmurando para luego mirar hacia otro lado.

— ¡ Hey Tweek !— Llamó una voz conocida que hizo dar rápidamente vuelta a Tweek.

   Se trataba de un pequeño grupo formado por un chico rubio de pelo largo, otro de cabello negro y una chica también rubia.

   Craig los miró con un tanto de odio pero luego se paró a pensar. ¿Quienes eran y porque conocían a Tweek? Antes de poder decir una palabra más el rubio salió corriendo en dirección de ellos. Sus ojos miraban con desprecio a ese pequeño grupo. No quería que su rubio estuviera con otras personas que no sean el. Quería que sólo sea de el.

    Las clases comenzaron y a Craig le había tocado la misma clase con Tweek. Nunca presto atención, sólo lo miraba a el. Queria volver a sentir esos suaves y delganos labios, nisiquiera lo conocía bien pero quería estar con el todo el día.
 
   El timbre tocó para el receso y el azabache no salió, quería que primero saliera ese chico que tanto miraba para poder por lo menos hablarle. Pero justo cuando salió de topó con quién menos quería en ese momento.

— ¡ Craig ! — una mano tocó el hombro del antes mencionado, cosa que obviamente lo molestó.

— ugh, que quieres Marsh — habló con su típica voz monótona mientras sacaba la mano del contrario de su hombro el cual luego se limpió.

— Un beso tuyo — coqueteo el azabache

— Marsh por última vez, deja de ser gay conmigo me molesta, además, ¿No estabas saliendo con Kyle?

— oh cierto— recordó Stan.

— Da igual, hoy es día de práctica recuerdas?— comentó mientras empezaba a caminar junto a su antes enemigo.   
   
— Oh mierda, lo olvidé, ¡cómo tú me olvidaste ese jodido día!— volvió a hablar molestó el de ojos olivos.

  El de gorro azul y rojo soltó un suspiro y habló nuevamente.
 
— Craig por favor, ya pasaron dos malditos años desde que eso pasó, yo tengo un nuevo novio y tú tomaste otro camino, te lo he explicado muchas veces pero tú no entiendes. — dijo ya algo cansado mientras estaba al frente del de chullo.

— No entiendo y jamás entenderé, mi más grande error fue haberte aceptado hace dos jodidos años.—recalcó lo último y miró amenazante al de al frente y luego volvió a hablar— Sólo estoy en la banda por dinero..