Hora de dormir

347 35 2
                                    

El actual Robin se encontraba vigilando la oscura ciudad de Gotham desde la cima de un edificio. Observaba las calles con sus binoculares sin saltarse ni un detalle, aunque había un ligero problema y es que el Árabe no había dormido durante cuarenta y ocho horas, dejándolo en este instante muy agotado pero aun así decidió vigilar la ciudad.

— No crees que deberías descansar? — pregunto alguien detrás suyo y es más que obvio que reconoció de quien se trataba.

— Métete en tus asuntos, Todd — contesto el menor para dar un ligero bostezo por el cansancio — Que haces aquí?

— Bueno, estaba pasando y te vi aquí solo así que decidí pasar a ver que hacías — contesto mientras que se acercaba al menor.

— Por qué no te largas? No necesito una niñera — comento Robin para seguir viendo las calles.

— En realidad, como en el pasado fui tu guardaespaldas fui como tu niñero [Y sigue siendo mi deber protegerte] — pensó mirando se reojo al menor quien ni le dirigía la mirada.

— Tt, si claro — susurro para dar otro pequeño bostezo el cual callo al instante.

— Estas muy cansado, no dormir durante dos días es muy malo — informo Red Hood para arrodillarse y estar en la altura del Árabe.

— Y? Que quieres? No ves que estoy -bostezo- ocupado? — dijo mientras que se balanceaba hacia un costado pero reacciono rápido.

— Cuidado, pequeño Gremlin — pidió un tanto divertido el mayor, más se puso serio al ver como Damian guardaba sus binoculares y aunque no se notará tenía una mirada un tanto cansada — Oye, ven te llevo a casa

— No, déjame luego me voy solo — dijo, pero no se pudo resistir cuando el mercenario lo cargo, abrazándolo a su cuerpo — Todd, bajarme

— No, te llevare a que duermas un rato — dijo viendo como el moreno intentaba separarse pero no podía — [Ya casi y se parece a Tim]

Lentamente con su gancho bajo del edificio para no despertar al petirrojo, quien se quedó dormido abrazado a su cuello como un koala. Al bajar se fue a un callejón donde se encontraba estacionado un auto, abrió la puerta trasera y metió al menor recostado ahí para que durmiera tapandolo con su chaqueta, luego se subió al asiento de piloto para comenzar a conducir en direccion a la mansión Wayne.

— [Todavía me preocupas enano y no pienso dejarte solo, sin importar que] — se prometió el ex Robin mirando por el retro visor del vehículo al pequeño petirrojo que dormía plácidamente en los asientos de atrás, mientras que sonreía un poco entre sueños.

♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎

La vi como un tanto abandonada la historia así que decidí hacer este cap cortito.

Hasta luego.

HermanosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora