UNA CARTA PARA EL MAÑANA

ACOMPAÑARTE

17/01/2023

Era hermoso seguir sus pasos, amaba el calor que bridaba esa bella alma, era como el olor de las flores que alejaban todo mal y se abrían mostrando la belleza en cada amanecer. No quería alejarme, quería estar ahí, quería estar contigo y seguirte en cada momento.

Te quería conmigo... pero no eran los mismos caminos porque yo tenía el mío, debía construirlo y tu tenías el tuyo.

Me gritabas porque ya no te seguía, veía como no caminabas como antes, tu olor se desvanecía porque ya estabas cambiando.

Eras como la mariposa en el capullo

De pronto las mañanas no tenían el sol brillante de antes, porque venias acompañada de nubes grises, y tu calor se volvió frio y helado... lamentablemente ya no podia abrazarte, te vias muy lejos para poder calmar esas tormentas.

El verte así me hacía sentir miserable porque no tenía como acompañarte y, aunque te hablara ya tu tenías la respuesta a todo y yo solo podia acompañarte en silencio... tenías que crecer como la flor que solo crecía bajo su propia semilla, esa que tenías plantada.

Y esa...eras tú que tenías tu propia alma y esencia, esa que te hacia ser libre cuando nadie te acompañaba, ya que tu/ella se dirigía como marino, porque siempre llevaba el timón de la barca.

Ella tenía su propia bandera como la guerrera que era.

No podía acompañarte porque tu solita te llevas.

Y esa es la mejor manera de verte feliz en cada mañana, lástima que tomaras café conmigo...