El Niñero | Pablo Gavi

9.- no soy un juego

Pasó un mes después de lo que había pasado con Pablo, desde ese momento yo iba a todos sus entrenamientos y el también a los míos, las redes, noticias y de más decían que el y yo éramos pareja algo que a Pablo no le gustaba mucho, por su carrera como futbolista.

El día de hoy tenia que estudiar para el examen y no podía pasar tiempo con Pablo, mi madre llevo a Andre al trabajo y no había nadie en la casa, estaba estudiando cuando llego una notificación de noticias.

Noticias de último momento
El Futbolista más joven de la selección española Pablo Martín Paez Gavira más conocido como "Gavi" fue visto saliendo de un club nocturno con una chica que no se ha podido identificar, al salir tomaron fotos del el y la chica dándose un beso al parecer es su novia.

Ver esa noticia rompió mi corazón estaba tan destrozada que no quería aver nada de él... Me solté a llorar desconsoladamente hasta que me llegó una llamada justamente de Pablo, yo decidí no contestar no quería ni hablaré, luego de colgarle 5 veces escuché que llamaban a la puerta de la casa.

Baje para ver quién era y vi a Pablo en la puerta con tulipanes en sus manos, al ver mis ojos rojos e inchados se acercó pero yo di unos paso atrás.

- ¿Que pasa mi niña? - hablo dejando las flores a un lado en la mesa de recepción.

- ¿porque Pablo porque…? - el se acercó lentamente y tomo en mi cintura yo rápidamente quite sus manos de ahí y el mire con asco.

- ¿de que hablas? - dijo desconcertado.

- ahora estás como si nada pero ayer en la noche ¿que fue lo que hiciste? - lo mire con furia.

- en mi casa porque - sabía que me estaba mintiendo y podía ver sus nervios.

- ¡no me mientas! - saque mi celular y busque aquella noticia, le mostré la publicación, lo miro y pude ver en sus ojos los nervios que tenía.

- puedo explicarlo… -

Yo no dije nada y tomé las flores que había traído, las apreté con fuerza y se las lancé con fuerza el me miro mal y le cerré la puerta en la cara.

Al otro lado de la puerta pude escucharlo - no es lo que parece... Andrea déjame explicarte de una vez por todas lo que en verdad paso - yo simplemente subi a mi habitación para seguir estudiando, aunque sería imposible.

[…]
Al día siguiente

- ¡ANDREA BAJA YA! - Hablo mi madre desde el comedor.

Baje tenía inchados los ojos mi madre se acercó y acaricio mi mejilla.

- ¿Todo bien mi niña? - pregunto mi madre ella me miró y por alguna razón mi madre parecía saber lo que había pasado.

- ¿te has enamorado? - solté, sin ganas de hablar.

- mi niña… claro tu padre fue mi primer y único amor, y desde aquel accidente sentí que había perdido una parte de mi pero después entendí que tienes que aprender a dejar ir, pero se muy bien que me dejó dos regalos muy pero muy hermosos - ella me miró con una sonrisa delicada.

Sonreí a ante esas palabras por un momento sentí paz, y tenía razón hay que aprender a dejar ir cosas que nos hacen daño…

[…]

Era el día del examen y era la única oportunidad de pasar al siguiente año pero toda lo noche solo pude pensar en la noticia de Pablo y no me concentre en estudiar…

Entre al salón con los nervios de punta, sabía que no había estudiado mucho así que iba dar lo mejor de mi y veremos qué pasa.

Fue la penúltima en terminar mi examen eso es algo que nunca me había pasado en la vida y sinceramente me sentí mal, tenía miedo de reprobar, me acerque al profesor este me miró extrañado.

- ¿señorita Andrea? ¿Porque esta vez fue una de las últimas? - pregunto el Profesor Gómez.

- siempre hay una primera vez ¿no? - sote una carcajada nerviosa.

- esto no es normal en tí… ¿todo bien? - me miró con preocupación y si tenía razón esto no era muy común en mí, pero realmente me estaba afectando lo de Pablo.

- no se preocupe estoy bien… gracias por preguntar - me dirigí a la salida pero me tope con Galilea, ella era la última persona que quería ver en ese momento.

- ¿Andrea? ¿Tu saliendo de último en un examen? - al parecer era demasiado extraño que salga de un examen tarde, pero no creo que sea para tanto.

- si… ¿hay algún problema? - le pregunté irónicamente.

- no… o bueno te conozco y sé que te está pasando algo… yo sé que fui una mala amiga pero aun me importas créeme - hablo tomándome de la mano, realmente ella también me importaba en el fondo pero me dolió mucho lo que pasó aquella noche.

- te agradezco que te preocupes por mí pero… - suspiré - creí que no te follarías con el, soy tu amiga y me hiciste eso… me dolió de verdad - la mire a los ojos seriamente pero podía ver sus arrepentimiento.

- no quiero estar mal por un chico, solo dame una oportunidad, solo eso te pido, no pido nada más - sabía que me decía la verdad y sabía que estaba arrepentida.

- está bien… - solté sinceramente si quería perdonarla, ella me abrazó yo me separé de ella para verle a los ojos - pero si me vuelves hacer lo mismo juro que te mató - ella simplemente asintió.

[…]

Llegue a mi casa y al entrar vi a Pablo sentado en sofá, el me vio y rápidamente se levantó de su asiento para dirigirse donde yo estaba.

- ¿que haces acá? - le pregunté con indiferencia.

El me miró con tristeza - déjame explicarte porfavor… - intentando acercarse pero yo se lo impedí, lo empuje lo suficiente para que diera unos pasos atrás - solo escúchame ¿quieres? - podía ver qué había llorado por lo hinchados que estaban sus ojos pero eso no me importaba.

Yo no dije ni una palabra dejé el espacio para que el hablara, quería escuchar sus versión.

- si se que lo arruine pero fue un accidente… yo tomé de más y esa chica no se quién es, no recuerdo quién es, y no la ubico pero sé que no hice nada con ella porque Pedri fue el único que estuvo todo el tiempo conmigo y procuró que no pasará nada… y si no me quieres creer preguntale a Padri el te dirá la verdad - hablo acercándose a mi, algo en mi quería abrazarlo pero sabía que me seguiría haciendo daño, y talvez suene muy egoísta pero en todo esto saldríamos perdiendo.

- te creo… pero no esperes que las cosas vuelva a ser como antes, porque no… - el me miró extraño.

Si expresión cambio drásticamente de estará triste a una cara sería y fría - ¿a que te refieres con eso? - al preguntar eso sentí como su frialdad en el ambiente - antes te morías porque te amará como tú lo hacías y ahora que lo estoy intentando me dices esto ¿¡que Carajo quieres Andrea!? - sabía que se había alterado pero me dio un poco de miedo… lo había vistos así en sus partidos pero jamás así conmigo, di unos pasos atrás por el miedo, el seguía caminando y cada que caminaba yo retrocedía.

Al dar un paso más atrás había sentido el frío de la pared, estábamos cara a cara, tenía un pánico que reflejaban mis ojos pero a él no le importo - estoy haciendo el intento de amarte pero lo haces difícil por eso todos te buscan solo por sexo - al escuchar esas palabras me solté a llorar el se separó al darse cuenta de las palabras que habían salido de su boca, intento tomar de mi mejilla pero yo lo impedí yo quería saber nada de él.

- vete de mi casa… - hablé sollozando con mi vos entré cortada que apenas se podía enter lo que decía.

- Andrea perdóname - hablo tomando mi mano.

Rápidamente la quite lo mire y vi su arrepentimiento en sus ojos pero esta vez no caería en sus encantos - amar no se trata de intentar Martín se trata de querer a esa persona, no de intentar, no soy un juego para que intentes conmigo… - le cerré la puerta en la cara.

[…]