Hijo De Papi • Sparta & Raptor

Yo Cuidaré A Mi Niño • OO5

— No te creo que Gonzalo haya hecho todo eso ¡Es que no lo entiendo!

— Sé que porque no habla con nadie, parece muy tímido e inocente no te lo creas, pero lo conozco perfectamente, he visto muchas cosas que ha hecho para quitar personas del camino, recuerdo que hubo una vez que casi ahorca a una chica porque Andrés una vez la consoló.

— ¿Qué?

— Eso pasó hace como tres años, si no mal recuerdo su nombre era Adriana, a ella le gustaba mucho Andrés y se le notaba demasiado, una vez lloró en clase y Andrés fue a consolarla, la abrazó y no me acuerdo que más hizo. El siguiente partido de fútbol mientras Andrés estaba apoyando a Gustavo desde las gradas, Ari se escondió debajo de ellas y cuando todos gritaban tomó las cuerdas de la sudadera de Adriana, las apretó contra su cuello y comenzó a tirar para atrás, por suerte lo detuve antes de que le pase algo a Adriana, no quiero imaginar que hubiera pasado si no lo encontraba.

— Está demente.

— Lo sé, ¿Por qué crees que me sigo juntando con él? Si me considera como un amigo no me hará nada, además puedo detenerlo en muchas de sus tonterías antes de que haga una tragedia, tú te juntas mucho con Andrés, deberías hacer lo mismo que yo antes de que te considere una "amenaza".

— Creo que lo haré.

— Oye, no le digas a nadie lo que te acabo de decir, por favor.

— Tranquilo, de mi boca no sale nada.

— Gracias, Miguel.

La historia de amor que sus amigos no podían vivir, la vivían por ellos, no sabían el lugar, ni el momento en el que pasó, pero ahora estar juntos los hace muy felices aunque se nieguen a decirle al otro sus sentimientos.

Dos corazones latiendo a la par mientras que otros dos se fuerzan a amar.

[...]

— Ari, perdón, me di cuenta de que fui un estúpido, eres mi mejor amigo y debo de apoyarte.

— Te perdono, no me puedo enojar mucho contigo, además te tengo que contar lo que pasó con Andy luego de que se fue.

— Claro, no me dejes con la duda, ¿Qué hicieron?

— Mi Andy me llamó llorando y me pidió que fuera a su casa, lo consolé y vimos una película, cuando empezó a aburrirse se durmió en mi pecho ¡Fue como en un sueño! ¡Te dije que le gustaba, solo tenía que sacar a Gustavo del camino!

— Awwww... Que lindos.

Estaba claro que eso no le parecía tan lindo, no apoyaba las acciones que había hecho su amigo para llegar a ese resultado.

— Lo sé ¡Muy pronto le pediré ser mi novio!

— Estoy seguro que no te rechazará.

[...]

— No juegues con él de esa manera, Sparta, sabes lo que siente por ti, no seas idiota.