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Enero 2023

Es mi último día de vacaciones en Argentina, después de que la selección ganará la copa en Qatar obvio tenía que celebrar y que mejor que viajar a Argentina para celebrar con mi gente, pero ya se acabaron esas pequeñas vacaciones, claro que la pasé genial y conocí a mucha gente, como la sociable loca que soy.

Tenía que volver a Inglaterra, ya extrañaba mi país, pero más iba a extrañar esos mates que me hacía mi abue, aunque solo fui a Argentina para pasar vacaciones con mis abuelos y mis amigos también para celebrar todos los días la victoria que todavía no supero.

Yo amo Argentina como si fuera mi país amo la cultura y la gente tan hermosa que tiene. Toda mi vida a sido de Inglaterra a Argentina, gracias a mi mamá que es de Argentina y mi papá de Inglaterra. En Inglaterra tengo mi trabajo como modelo y soy bastante reconocida para ser tan joven la verdad.

Siempre me llaman ofreciendome contratos para publicidad o campañas para ropa o accesorios, esta es una de las razones por las que me tengo que devolver, ya que tengo un contrato muy tentador esperando ser firmado por estas bellas manos.

-Levantate nena que vas a perder el vuelo- me grita mi abue -pero dale pendeja, no me ignorés.

-Dale abue, ya va, pero no me grites- me levanto, me voy al baño y pongo música para bañarme y terminar de levantarme por qué estoy que me caigo del sueño que tengo.

Ya bañada y arreglada mire la hora y me di cuenta que si no me apuro puedo perder mi vuelo, sali de mi cuarto apurada buscando a mis abuelos para despedirme y los encuentro en la cocina con caras tristes.

-Naa ¿por que esas caras?-mis abuelos me miran y mi abue dice - No queremos que te vayas nena, nos haces mucha falta cuando no estás.-

Mi abuelo baja la cabeza y veo que se le sale una lágrima-Abuelo no llorés, sabés que yo vengo cuando puedo, sabes que por mi trabajo no es fácil pero yo lo intento-bajo la cabeza yo también intentando no llorar.

Mi abuelo es muy sentimental, muy tímido y super buen cocinero, por eso lo amo tanto.

Mi abuela me abraza y me llena de besos
- pendeja te amo mucho y lo sabés-dice suspirando- aprovecha que eres joven y tenes una belleza de locos, no dejes que ningún pibito de esos te vuelva a romper ese corazón tan grande que tenés.

-Gracias abue, te amo mucho más, y claro que no voy a dejar que ningún pibito de esos ni se me acerque-digo riendome- Gracias en verdad por todo lo que hicieron por mi y gracias por recibirme.

-Sabes que esta es tu casa, acá te recibimos cuando sea-habla mi abuelo con los ojos llorosos.

-Chau abuelos los amo mucho enserio- me despido abrazandolos

-Chau nena que te vaya bien, ojalá que se te pase rápido ese viaje, y nos llamás cuando llegués, bueno? -me pareció raro que mi abuelo hablara tanto, el casi no habla- dale abuelito, en verdad gracias por todo.

Se escucha un carro afuera llegando y se que ya llegó el taxi por mi, cojo mis maletas y salgo dandoles una última mirada a mis abuelos y bajando la mirada, no quería que me vieran llorar, me prometí que no volvería a dejar que nadie me viera llorando.

Me subo al taxi pensando en todo lo lindo que viví en este tiempo.

Cuando llegue al aeropuerto, baje mis maletas con ayuda del taxista y le pague.

Fui para mi vuelo de Rosario a Buenos Aires y me prepare sabiendo que es un vuelo demasiado largo.


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