Dirty mind.

Cumpleaños

Era un nuevo día en el arroyo, los niños jugando, y la chica de lentes vendiendo cosas, las chicas equestrias haciendo cosas raras de caballos y los típicos boys scouts pensando en que hacer hoy.

Por otro lado también están los raros del arrollo, Kelsey, Craig y Juan Pablo, alias, JP.

La 'guarida' secreta de estos extraños chicos había estado en silencio por algunos 48 minutos con 14 segundos, lo único que se escuchaba y que no era ningún tipo de objeto de la imaginación de estos extravagantes niños eran dos cosas; el viento y el agua corriendo en la quebrada.

Siguieron así, callados, eso hasta que Craig dijo algo que puso curiosos a los otros chicos presentes.

 "Necesitamos hacer una encuesta" dijo el chico de tes oscura.

 "¿Qué?" Contestó la chica.

 "Una encuesta"

 "... Sobre, ¿qué, exactamente?"

 "Los cumpleaños de los chicos del arrollo, sería lindo si lo celebrasemos con ellos"

 "¿crees... Que nos lo dirán?"

 "Claro, ¿por qué no?"

 "Si tú lo dices, ¿tú qué piensas, JP?

El chico alto de cabello rojizo entró a la conversación, (por petición de Kelsey), y en respuesta a la pregunta de su pequeña amiga se dispuso a decir "Realmente no lo sé, si ustedes están bien con eso entonces ¡voy con ustedes, chicos" y les propició una enorme y acogedora sonrisa.

 "No sé con quién empezar, ¿ideas?"

 "Realmente no" respondió la chica.

 "Quizás empezamos por edades, bien. Entonces si es por edades... ¡Los elders!"

"Bien, aunque, son algo... Ya sabes"

"Se que no son las personas más cuerdas pero cada quien merece una fiesta"

 "Supongo que sí"

 "Vamos, verás que no va a ser para tanto"

Los tres chicos se apresuraron en la misión de hablar con los elders, iba a ser difícil puesto que estaban fuera del arrollo, le preguntaron a mucha gente y no hubo suerte por más que hayan preguntado trece veces a personas diferentes.

Se iban a dar por vencidos hasta que a Kelsey se le ocurrió una idea, ella les recordó que los elders tenían un canal de streaming que, si bien no era nada famoso, algunas tres personas lo miraban a diario. Kelsey también recordó que ellos publicaban cada pequeñísimo detalle de sus vidas: mala idea, bueno, David no lo hacía (inteligente). Kelsey busco entonces, el stream de ese día, lo encontró y topó con que los elders iban a estar en la biblioteca. Le dijo a Craig y se dirigieron hacia allá lo más rápido que sus piernas se los permitieran.

Craig, JP y Kelsey, curiosos, tropezaron con David y Mark en medio de una rara discusión amor-odio-doble sentido en la biblioteca.

David y Mark, enredados en un juego de palabras afiladas, no pudieron ocultar la chispa que se desataba entre ellos.

Craig, JP y Kelsey, observadores silenciosos, captaron la tensión que flotaba en el aire y compartieron una mirada intrigada.

Mark y David, a pesar de sus desacuerdos, no podían evitar los destellos de complicidad que asomaban en momentos inesperados.

Los chicos del arrollo, al unirse al grupo, se sumergieron en una atmósfera de amor-odio palpable, donde las risas y las miradas intensas coexistían en equilibrio con las palabras e insinuaciones de odio, al igual que con las insinuaciones de doble sentido.

Los elders, entre disputas y risas compartidas, se encontraron atrapados en una danza de emociones contradictorias, creando una dinámica única y compleja.

La tensión amor-odio se volvió una forma peculiar de conexión entre David y Mark, mientras Craig, JP y Kelsey disfrutaban del intrigante espectáculo de esta relación indirectamente romántica.

Estaban tan curiosos acerca de la montaña rusa de emociones expresadas en aquella discusión que olvidaron por completo la finalidad del encuentro con los elders.

Seguían completamente pegados a cada palabra que soltaban las cuerdas vocales de Mark y, eventualmente, David.

Todo en esa situación era rara, no había ni rastro de Barry, Mark y David no estaban golpeándose con cualquier cosa que encontrasen y la biblioteca estaba en un turbio silencio.

"Oigan, ¿no veníamos a preguntar las fechas de sus cumpleaños?" Soltó inesperadamente la chica.

"¿Uh?" Dio en respuesta el alto de cabello naranjo.

"Cierto, ¡Maldición! Me olvidé por completo de eso, Dios" Dijo Craig.

-- ¡Oh, sabios ancianos! -- En cuanto Kelsey pronunció aquellas palabras los dos chicos presentes voltearon con sorpresa.

—¿Quién eres tú?
—Dijo el de lentes.

—¿Kelsey? Ya he hablado con ustedes. —Contestó, algo molesta.

—Oh, cierto, no te recordaba.
—Dijo con indiferencia.

—Ehh, como sea, el- mis amigos y yo venimos a hacerles unas cuantas preguntas personales.

—¿Qué tan... personales?
—David entró a la conversación, estrepitosamente.

—No es tanto, no te preocupes, es... es  —El moreno chico meneó la cabeza de lado a lado intentando pensar en una buena respuesta que le diera seguridad suficiente a David como para contestar —Son preguntas personales básicas.
—Soltó exasperado.

—Ahg, sus cumpleaños, eso queremos saber, las fechas, ¿si?
—Dijo Kelsey con un tono de desespero, todavía les faltaban muchas personas a las cuales preguntar y a ella nunca le había gustado el ser paciente.

—Huh, ¿para... qué exactamente quieren saber eso?                                           —La desconfianza de Mark era tan obvia y espesa que los chicos podrían jurar que la sentían mientras movían sus manos por el aire.

—Queremos celebrarlo con ustedes.

—¿En serio? Wow ¿Hablas en serio?
—Soltó David, claramente emocionado.

—Sí.

—P-pues yo cumplo el 6 de diciembre, jaja, y... me gusta la tarta de zanahoria.
—Dijo David con una connotación casi innotable de inseguridad.

—Súper, tarta de zanahoria será entonces. Dijo la pelirroja.

—Muchas gracias chicos.
—él sonrió bobaliconamente con sus lindos y grandes dientes frontales sobresaliendo por sobre sus suaves labios.

Ola xikos komo estam esepero que vien

Llo estoi reasyendo eseta istorya

no me gusataba komo la yse amtez

Lla ce ke la mueba tranma non tiene naada ke ber kon la antywua pero eseke non me gusataba