𝙈𝙞 𝙝𝙮𝙪𝙣𝙜, 𝙣𝙤 𝙩𝙪𝙮𝙤 • 𝐇𝐲𝐮𝐧𝐢𝐧↯

siete

Después de un domingo tortuoso, Jeongin iba a la universidad para encontrarse con Lee Heeseung.

Mientras caminaba trató de patear todas las piedritas que se encontraba. El solo recordar que ayer perdió el orgullo dejando tres mensajes pidiendo disculpas a su novio y siete llamadas no contestadas, lo hacían bajar la cabeza.

—Hola, Heeseung —Saludó al pelinegro cuando llegó a su lado.

Estaba en una banca del área verde de su facultad, junto a la planta que ahora le toca cuidar a Jeongin.

—Hola, ¿cómo vas de salud?

Cierto, le hicieron creer que estuvo enfermo.

—Mucho mejor.

—Pero te ves decaído —. Era cierto—. Digo, no es que te veas mal, pero...

—Sí me veo mal —Completó.

Los dos rieron por la forma inusual de hablarse por primera vez.

—¿Mala noche?

—Algo así, problemas con Hyunjin, en realidad.

—¿Es tu novio? —. Otro que no sabía.

—Sí, creí que era de conocimiento de... todos.

—Bueno, no ando muy pendiente de tu vida o la de él, —dijo sincero—, pero hacen linda pareja, déjame decirte.

Jeongin sonrió, este Lee Heeseung le comenzaba a caer bien, dejando de lado que lo acusó con su profesor, pero después de ello, hasta se le hizo simpático.

Siguieron conversando sobre ellos, el horario en que cuidarían al frijol y también resolvieron la falla en comunicación que tuvieron al inicio.

—¡Lo juro! Fue gracioso cómo nos caímos —Habló-gritó Jeongin, quien sin querer se apoyó en el hombro de su nuevo amigo.

Heeseung reaccionó riendo y por instinto, su mano derecha terminó palmeando el muslo de Jeongin.

—Oye, ya estuvo bueno, ¿no? —Esa voz junto al empujón que recibió Heeseung fueron suficientes para separarlos.

Jeongin fue envuelto por su novio, quien lo ignoró todo el domingo, como si no hubiera pasado nada.

—Disculpa, solo hablábamos —El menor hizo una reverencia—, ya llegó tu novio, te dejo al frijol.

—Perdona su reacción, te escribo luego para coordinar.

Heeseung asintió y se fue sin querer ser empujado de nuevo.

—¿Por qué te estaba tocando la pierna? —Fue lo que le dijo después de Jeongin soltarse.

—Dejaré pasar lo de ahora si me dejas explicarte el asunto con Seung-

—No quiero. —Se acercó a abrazarlo con algo de torpeza.

Hyunjin sí seguía un poco molesto, no era bueno controlando sus ganas de perdonar al menor, pero debía dejarle en claro que mentir y hacer daño a los demás no es lo mejor para nadie.

Eso fue lo que acordaron al iniciar con su relación hace dos años, que cada uno se encargaría de llevar al otro a ser una mejor persona, y si le decía a Jeongin que no se preocupe, él siempre le perdonaría todo, pues su actitud no sería diferente.

—Mejor explícame qué hacía Lee Heeseung riendo tan fuerte contigo —Habló con la voz aniñada, meciéndose junto a él.

Hyunjin se quería hacer pequeño y que su novio lo llene de mimos en ese momento. Para él, el corto tiempo "peleados" le había parecido una eternidad.

—Le estaba contando la vez que nos caímos en la piscina de mi tía, cuando viajamos a Busan.

Hyunjin asintió con más tranquilidad y se escondió en el cuello del menor. No desconfió de él en ningún momento, solo era su yo engreído reclamándole por no ser él quien sacaba esa sonrisa en su novio.

—Hyung —Lo llamó luego de un rato abrazados. Le gustaba la posición, pero debía pedirle disculpas y no quería alargarlo.

—¿Um?

—Sé lo mal que estuvo sabotear tu trabajo y... bueno, negar mi culpa tantas veces —Se acercó a su rostro—, te sonará infantil, pero estaba celoso.

Hyunjin arrugó las cejas y tomó su mano para guiarlo a otro lugar con más privacidad. Llegaron a la vuelta de la facultad de letras, detrás del jardín, donde una pared los cubría.

—No creas que tus celos pasan desapercibidos—Sonrió, después de jugar con algunos mechones del contrario—, el problema es que esta vez hiciste daño.

—Pobre, Binnie.

Hyunjin rio, demostrando que no estaba molesto ni triste.

—Y pobre Seungmin, le tiraste toda la culpa.

Ahí vamos, otra vez con lo mismo.

—¡¿Pero si quiera me crees?! Te dije que lo escuché decir que le gustas y quiere meterse-

No siguió porque Hyunjin lo besó, tuvo que ser algo rápido con los labios porque Jeongin quiso seguir arremetiendo contra Kim, pero luego se relajó y siguió el ritmo. Oh, santa planta, Hyunjin sabía cómo callarlo y dejarlo sin aire.

El chasquido de sus labios húmedos separándose fue señal para que recupere sus pensamientos y no se distraiga con esos rosados y lindos...

—¿Me estás escuchando?

—A-ah, sí —Sacudió la cabeza.

—Te decía que te creo, Jeongin, por eso no tiene por qué importar. Sea Kim Seungmin, Choi Soobin, Jang Wonyoung o la reina de Corea, créeme que no cambiaría de opinión, ni siquiera voltearía a mirarlos cuando te tengo en mi vida.

Los dos se miraban a los ojos con brillos y ligeras sonrisas.

—Ahora me siento avergonzado, siempre intento dejar en claro que yo estoy contigo, pero no me di cuenta que tú mismo te encargas de eso.

Hyunjin sonrió en grande.

—Eso porque todavía estás madurando —Acarició su cabeza—, y eres algo tontito.

—Yah —Recibió un golpe en el pecho que lo hizo toser, pero luego reír.

—El tonto eres tú, hyung.

—¿Yo? ¿Quién lo dice?

—Sí, y créame que si hubiera un grupo de tontos, usted sería el líder.

Hyunjin negó con su cabeza, pero la alegría que sentía nadie se la podía quitar.

Después de arreglar sus asuntos, compartieron un rato más sus labios hasta que recordaron sus respectivas clases.

Ya volviendo a lo que siempre eran, caminaron de la mano, uno balanceando la unión mientras tarareaba alguna canción infantil, mientras el otro lo admiraba con una sonrisa.

FIN.

estoy feliz de que leyeran esta historia
gracias <3

020223