Innocent (SeokSoo)

𝙄 𝙣𝙚𝙚𝙙 𝙮𝙤𝙪𝙧 𝙡𝙤𝙫𝙚

Tenía un libro en la mano y estaba recostado en la cama, moviendo el pie al ritmo de la música que salía a través de sus auriculares.

Joshua se encontraba estudiando en el cuarto de su novio, que hacía un trabajo de la universidad, sentado tras su escritorio, utilizando su laptop.

La razón era que Joshua quería acompañarlo, pero cada uno tenía sus asuntos pendientes relacionados a sus respectivas facultades. Seokmin tenía un trabajo final y Joshua tenía un examen importante en dos días, así que se encontraba estudiando, pero en el mismo espacio que su novio.

A fin de cuentas, Seokmin decía que tener la presencia de Joshua cerca de él era suficiente motivación para hacer cualquier cosa. Si se desmotivaba, una mirada a su novio era suficiente para regresarle el ánimo. Y lo mismo sucedía con Joshua.

Ya había bajado el libro varias veces con los ojos cansados y demasiada información en su cerebro, pero miraba a Seokmin con su atractivo perfil y trabajando con diligencia, y podía sonreír, para continuar estudiando con energías renovadas.

Así se daban compañía y motivación mutua. Las responsabilidades de la universidad no los separaría ni se interpondría en su relación que ya llevaba dos años.

Joshua con 24 años y Seokmin con 22 actualmente, pero se conocían desde siempre, pues pertenecían al mismo grupo de trece amigos.

Se habían enamorado en silencio, hasta que Seokmin se confesó primero y Joshua también reveló sus sentimientos, comenzando su relación formal.

Pero sus amigos, que entre ellos había parejas formadas también, decían que Seokmin y Joshua eran el par más inocente que había.

Joshua, tan reservado, gentil y caballeroso. Seokmin, tan brillante, cándido e inocente...

Sí, claro, inocente. Joshua sabía mejor que nadie que eso no era verdad.

Era sólo su apariencia de sol, pero Seokmin podía quemar.

Esos pensamientos se lograron inmiscuir en Joshua que se distrajo y tuvo que bajar el libro porque leyó el mismo párrafo varias veces sin tener buena comprensión lectora.

Ya tenía los brazos cansados por cargar el grueso libro y había estudiado por una hora y media seguida sin descanso. Necesitaba despejarse un poco.

Se quitó los auriculares y enseguida escuchó un carraspeó continuo.

Se incorporó con sus codos y miró hacia la derecha, dónde Seokmin seguía mirando la pantalla de su laptop.

Su habitación sólo tenía encendida la luz de su aparato electrónico y la lámpara que estaba usando Joshua para estudiar.

Ya era de noche y las cortinas estaban cerradas. Ellos dos estaban solos en la casa, pues los padres de Seokmin se habían ido a una cena y el único hijo que tenían era Seokmin.

Y el menor seguía carraspeando, cómo si tuviera irritada la garganta. Todo el día, Joshua notó que su novio había carraspeado y parecía un poco más callado de lo normal.

—¿Te duele la garganta, Seok? —preguntó, girándose para quedarse sentado en la cama, viendo con las cejas bajas a su novio.

El moreno lo volteó a ver y sonrió enseguida.

—Sí, un poco, creo que la tengo irritada, al parecer me voy a enfermar.

—Owww... —Joshua inclinó la cabeza hacia un lado cuando Seokmin hizo un puchero.

Se bajó de la cama y lo abrazó, acercando la cabeza de Seokmin a su pecho.

—Pobrecito de mi bebé —dijo, mientras Seokmin se abrazó a su cintura, aceptando el cariño de Joshua, que acarició su cabello, sin dejar de recargar la cabeza de su novio en su pecho.