Si la veo llorar de nuevo... [Cylou]

Único

"¿Quien hizo esto?"

Nilou nunca antes había visto esa expresión, una expresión sombría, la ira en su mirada, ahora que lo piensa, nunca había visto al General Mahamatra tan enojado como ahora.

Era culpa suya, debería aprender a controlar sus lágrimas.

"Cyno, todo está bien". susurró, tratando de sonreír. "Solo necesito... un momentito".

La expresión de la bailarina era realmente lamentable, sus ojos estaban hinchados y sus mejillas estaban rojas, quién sabe cuánto tiempo estuvo llorando... Nilou se estremeció cuando sintió la mano de Cyno en su mejilla, consiguiendo que ambos se miraran de nuevo.

"Si todo estuviera realmente bien, no estarías llorando así", respondió.

Nilou intentó mirar hacia otro lado; a veces le asustaba ver ese lado del hombre que amaba. La ira en su cuerpo, como matra, era su deber perseguir a los criminales que dañaban a las personas y no les importaba usar a otros para su propio beneficio, eso incluía a aquellos eruditos que dañaban a otros. Y últimamente, el número de estudiantes que acosaban a la pelirroja había aumentado.

No era la primera vez que aparecía llorando; muchos eruditos de la Academia fueron al teatro a reírse de ella o insultarla, no era la primera vez que Cyno tenía que ir allí y echarlos, la Academia no aprecia muy bien el arte... pero ese comportamiento no es excusa para insultar y desacreditar a quienes persiguen la danza y el arte, aunque él mismo no entendía la finalidad del arte, la idea de que otros pudieran reírse de ella lo enfurecía.

Pero la verdad, es que eso no era lo que lo enfadaba, lo que más le molestaba era que Nilou no se defendía, solo se quedaba allí congelada, escuchando y conteniendo las lágrimas.

Al igual que ahora. ¿Por qué no le respondía? Él quería saber los nombres de los eruditos que se habían atrevido a hacerle daño... El silencio lo estaba poniendo más ansioso, después de unos minutos, Cyno se levantó y exhaló.

"Iré a buscarlos en este instante y recibirán su justo castigo".

Estaba furioso, no le importaba si la Academia lo castigaba, haría cualquier cosa para defender su honor.

Sin embargo, Nilou lo agarró del brazo antes de que se fuera.

"¿Qué vas a hacer, perseguir a esas personas y golpearlas? ¿Llevarlos a la cárcel a la fuerza? No, tienes un puesto importante, eres el General Mahamatra, no voy a dejar que lo estropees todo por mis caprichos. ."

Cyno pudo ver las lágrimas saliendo de sus ojos, otra vez. "¿Tus caprichos? No se trata de tus caprichos, Nilou, se trata de ti ¡Tienes que defenderte!", Dijo, con ira en su voz. "¡Eres fuerte, si te insultan debes responder! ¿No sabes cuánto me duele verte sufrir así?

Nilou tiró de él y le hizo sentarse a su lado, él no se dio cuenta de que sus propias manos temblaban, Nilou sonrió con tristeza y Cyno abrió los ojos sorprendidos al verla, cada vez que la veía llorar le dolía mucho el corazón,.

"Lo siento." susurró ella de nuevo. "Tienes razón, debería aprender a defenderme".

Nilou cerró los ojos y respiró hondo. Siempre vio el bien en todos los seres vivos, incluso en aquellos que se atrevieron a hacerle daño, tal vez por eso, aunque esos eruditos realmente la lastimaron, se encontró incapaz de replicar.

"Pero a veces no sé qué decir". Nilou bajó la cabeza, estaba haciendo un gran esfuerzo por no llorar, pero su voz se estaba quebrando. "Sus palabras... son tan crueles".

Esta vez fue Cyno quien tiró de ella y la abrazó, ella le devolvió el abrazo de inmediato y apoyó la cabeza en su pecho, Nilou se sintió segura en sus brazos.

"Todo estará bien ahora, si quieres llorar, hazlo". él susurró. "Si no puedes defenderte, estaré a tu lado, te daré la fuerza que necesitas para enfrentarlos, estaré aquí siempre que lo necesites".

La bailarina dejó de llorar y sonrió, Cyno besó su cabeza antes de continuar hablando. "Aunque no lo quieras, el comportamiento de estas personas sigue siendo imperdonable, iré a castigarlos más tarde".

Pudo escuchar una risa genuina proveniente de Nilou, mientras levantaba la cabeza para mirarlo. "¿Puedes intentar no golpearlos esta vez? La última vez los golpeaste tan fuerte que los noqueaste".

Ahora era Cyno quien se reía. "No prometo nada... Pero supongo que asustarlos será suficiente".

Ambos no pudieron evitar reírse de eso; un grupo de eruditos, asustados por el general... Esa sí que sería una escena graciosa...

Más tarde ese día, en algún lugar cerca de la Academia..

"¿Viste la expresión en su rostro? ¡Fue tan patético!", dijo un erudito, mientras miraba a sus dos compañeros.

"¡Definitivamente! ¡Oye! ¿Deberíamos tirarle tomates la próxima vez?", dijo otro y pronto el tercero comenzó a reír a carcajadas.

"Sí, así aprenderá, esa per-..."

"Parece que ustedes tres la están pasando muy bien".

Una cuarta voz profunda salió de su escondite, sorprendiendo a los eruditos, quienes giraron sus cuerpos para ver de quién estaba hablando, esto iba a ser algo de lo que se arrepentirían.

"¡G-General Mahamatra! ¡Qué sorpresa! ¿Hay algo-..."

Antes de que pudiera replicar, Cyno se lanzó hacia adelante y lo derribó con un solo golpe, el hombre gimió de dolor, mientras el matra le ponía el pie en el pecho para evitar que se levantara, los otros simples muchachos huyeron despavoridos, dejando atrás a su pareja. Pequeños cobardes.

"Me han dicho que unos eruditos estaban acosando a una bailarina del teatro y sus acompañantes", el joven habla, "No estarás involucrado, ¿verdad?"

"¡N-no! ¡No somos nosotros, de verdad! ¡Te diré quiénes son, pero por favor no me lastimes!"

El erudito obviamente mentía y Cyno lo sabía, sabía que eran ellos, no obstante, en lugar de responder y dejar que supiese, Cyno se rió sarcásticamente. Era desagradable que la Academia permitiera este tipo de comportamiento, más aún que no los castigaran como era debido. Sin embargo, había algo que la Academia no sabía...

"No es necesario, solo tengo un mensaje para ellos... Si la veo llorar de nuevo..." Cyno comenzó a hablar de nuevo, apuntando su lanza al cuello del erudito, "Recibirás un castigo peor que la muerte".

Había una cosa que la Academia no sabía, 'cualquiera que se atreviera a dañar a Nilou sufriría la ira del general Mahamatra'.