Historias entre mundos

Cuando nadie ve

Cuando supe que estabas aquí solo me levante y salí corriendo a tu encuentro, dejando lo que sea que estaba haciendo, olvidando por completo si era importante o no, en ese momento solo me importaba verte y abrazarte, grande fue mi sorpresa al verte abrazando y besando a alguien, en ese momento algo se removió de manera dolorosa en mi corazón, nuestras miradas se encontraron, como amaba tu mira, hacía que me sintiera especial, me derretías con esa mirada, me congele en ese lugar, ahora entendía qué estaba pasando era tu manera de mostrarme cuál era mi papel en tu vida, sonreí y solo di media vuelta no iba a interrumpir tu momento de romance con Canadá, no iba a dejar que me lastimes más con este amor, volví a mi lugar y me concentre en lo que estaba en mi escritorio hasta que vi que era muy tarde por la noche y regrese a mi habitación el calor del verano hacía que quisiese salir a mi balcón, el suave viento hacía que mi cabello revoloteara, intente no pensar más en lo que había visto cuando fui a recibirte, intente embelesarme con la luna brillante de enero, y justo cuando estaba por hacerlo escuche la puerta siendo cerrada me asuste y voltee a ver, solo apreciando tu silueta acercándote a mí, solo voltee de nuevo a la luna no tenía ánimos de hablar contigo, tú ignoraste eso y solo me abrazaste con cuidado por la espalda con aquella linda voz tuya susurraste mi nombre

-Perú querida~, ¿Por qué no bajaste a cenar con nosotros?

-Estaba ocupada Finlandia, tú deberías saberlo, recuerdo habértelo comentado hace unos días por teléfono

-¿Es solo eso mi linda palomita?

-¿Debería tener otra razón?

-Tal vez lo que viste cuando fuiste a recibirme _ Con cuidado hizo que lo volteara a ver_

-¿Debería estar enfadada por eso?

-... Tal vez, pues nosotros

-Eres muy egocéntrico copito, ¿Por qué debería molestarme? Digo no es que fuéramos pareja o algo por el estilo

-Palomita nosotros... Entre Canadá y yo...

-No necesitas darme explicaciones, comprendo perfectamente cuál es mi papel, nos queremos cuando nadie ve

-Yo te amo

-Lo sé, ... Pero también lo amas a él, pero no vuelvas a traerlo a mi casa de la nada

-Perú por favor

-Es mi casa, puedo decidir quién entra y quién no, por esta vez lo dejaré pasar, pero no habrá una próxima vez

-Perú, no te comportes así de grosera con Canadá

-Me estoy comportando, educada, me agrada Canadá, es un chico muy dulce, así que no tengo nada contra él, solo es que de la nada me diste la responsabilidad de atenderlo, de preparar una habitación, de ser una buena anfitriona sabiendo muy bien lo ocupada que estoy, ... Por favor retírate que debo irme a dormir mañana tengo demasiado por hacer

-Está bien palomita descansa

Le dio un suave beso en el cuello para luego retirase de mi habitación, cuando escuche la puerta de mi cuarto ser cerrada me fui a mi cama y me deje caer sobre ella limpiado las lágrimas que apenas había logrado contener

-Las balas perdidas de este amor prefiero no verlas en mi piel

Deje en un sollozo, en una relación de tres ¿Qué corazón sufre más?, el indeciso, el que no lo sabe o el que posiblemente se queda con las sobras del amor, porque este amor solo puede ser cuando nade ve

Notas

-Me inspiré en esa canción de Morat

-Perú es la amante, no tan amante

-Haré otra parte en el futuro para que se enteren de cómo fueron las cosas

-No sean como Perú y no se aferren a un amor indeciso