La muerte es solo el comienzo

La muerte es la vida

Isagi estaba con sus amigos, en otra vieja tienda polvorienta, ¿qué estaban haciendo allí?

El trío de Idiotas estaba buscando algún juego antiguo para pasar la noche descifrando las reglas y formas de jugar.

Hacerlo se había convertido en una rutina en sus vidas estudiantiles. Todos los sábados, a las 20:00 horas, Isagi y sus amigos se reunían después de comprar un viejo juego de mesa, en una fiesta de pijamas en una de sus casas.

Lamentablemente hoy la fiesta sería en casa de Isagi. Por suerte, sus padres estarían fuera por la noche, así que no les importaría el desorden.

Isagi suspiró y siguió buscando algo en esta apestosa tienda hasta que encontró un juego.

- Chicos, encontré uno

En menos de un minuto sus dos amigos estaban a su lado, queriendo ver qué juego jugarían.

Chigiri un pelirrojo rojizo y mechones largos, que le llegaban un poco más arriba de los hombros, y Kunigami otro pelirrojo ahora de un tono anaranjado, sus mechones no eran tan largos como los de Chigiri, pero eran suficientes para que tuviera mucho.

- Oye, ¿no es uno de esos juegos de terror que ves en las películas?

Preguntó Kunigami, el pelirrojo más alto, y Chigiri sonrió emocionado antes de decir.

- Podremos probar si esto funciona o no

Isagi enarcó una ceja ante el pelirrojo y sonrió nervioso.

- ¿Estás seguro, Chigi? Sabes que no me gustan mucho estas cosas de terror.

- Oh, vamos Sagi, es solo un pequeño juego, no es como si los fantasmas y esas cosas fueran reales.

Chigiri trató de calmar a su amigo, y Kunigami inmediatamente le dio una sonrisa traviesa antes de decir

- Puedes usar eso como una excusa para pasar la noche besándote con Rin.

Isagi sintió que se le calentaba la cara y le dio una bofetada a su amigo.

-¿Por qué querría pasar la noche besándome con ese idiota gruñón?

Los dos pelirrojos se rieron y se encogieron de hombros.

- Tomemos este Sagi, es tu oportunidad.

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Cuando finalmente llegó la noche, Isagi se encontró sentado en el piso de su sala de estar, alrededor de un tablero que lo ayuda a hablar con los muertos.

Le dio escalofríos.

A sus amigos no parecía importarles que pronto intentaran hablar con un MUERTO.

Isagi suspiró con cansancio por quincuagésima vez esa noche solo.

- ¿Así que vamos a jugar? - Chigiri preguntó

Y todos asintieron con la cabeza, y Reo era uno de sus amigos(Isagi no estaba seguro de si Reo lo consideraba un amigo, pero le gusta pensar que sí)con el cabello morado aunque no era tan largo como el de Chigiri, los mechones tenían una buena longitud, le llegaban justo por encima de los hombros, recogió las reglas, leyéndolas en voz alta a todos.

- En resumen, ¿no deberíamos quitar las manos del tablero y no deberíamos ser groseros con los muertos?

Dijo Nagi, alto con cabello blanco y piel igualmente clara, mientras miraba el juego con una expresión aburrida. Siendo seguida por la oración de Rin, con su expresión de alguien que ni siquiera quería estar allí, su cabello negro, débilmente tirado a un verde, y sus hermosos ojos turquesa, Isagi tal vez estaba enamorado del gruñón más joven.