- Ahh~ por fin me voy de aqui, adiós problemas - se decia a si mismo un Uruguayo con un pasaje hacia Brasil en la mano -
El mismo día, el chico tomo sus maletas y se fue al aeropuerto, como en todo caso tuvo que hacer una larga fila y después fue a una cafeteria donde habia harta gente, se sento y esperó el avión.
En todo ese rato estuvo revisando su celular , aunque no tuviera internet, pero queria hacerse el interesante... en eso se le acerca un chico de tez morena(demasiada), era mas alto que el y venia sonriendo como un depredador sexual.- Orá, ¿você tem o tempo? -
El Uruguayo lo miro con cara de: "No entiendo una mierda", pero el otro seguia sonriendo
- Lo siento, no entiendo -
- ¿Español? -
- . . . Si, soy de aqui, de Uruguay -
- Ah, yo soy de Brasil - dijo sentandose - pero vine a Uruguay por cosas de familia -
- Eso es bueno, supongo - dijo el rubio Uruguayo con una sonrisa falsa que se notaba a kilometros -
- Si, ¿Y tu porque vas a Brasil? - dijo el moreno mirando el pasaje del Uruguayo -
- Por nada especial, escapar de la realidad un rato - dijo riendose de si mismo -
"Por favor, todos los pasajeros con destino a Brasil, dirijirse a la fila de embarque en los próximos cinco minutos", se escucho decir por el megafono.
- Bueno, me voy por ahora, para no perderme, adiós - dijo el Brasileño - Por cierto... ¿Cómo te llamas? -
- Sebastián, pero me dicen Seba - dijo sonriendo el Uruguayo -
- Me llamo Luciano, nos vemos, Seba - tomo us maletas y se fue -
Por alguna razón ese "Seba" le dio un escalofrio por la espalda, pero decidio ignorarlo e ir a tomar su vuelo.
- Muy bien todo listo, disfrute su vuelo - dijo sonriendo la asistente del mesón -
- Gracias - dijo el Uruguayo, luego entro al avión y empezo a buscar su asiento - 24F... 24F... -
Iba pasando por todos los asientos, hasta que llego al suyo, 22F, 23F y 24F, ahi estaba su asiento pero habia un posible problema si es que se podia llamar asi.
El mismo Brasileño que le habia hablado en la cafeteria ahora se iria practicamente al lado suyo, el estaba en el 22F.- ¡Woah!, que curioso - dijo el Brasileño parandose para que su "amigo" pudiera pasar -
El Uruguayo se sento en su asiento y dejo una pequeña mochila a sus pies.
- Que bueno, el viaje ya no sera tan aburrido - le hablaba Luciano a Sebastián -
- Si... haha - decia el Sebastián despidiendose de su llamado antigüamente tranquilo viaje -
Durante unos 5 o 6 minutos que el avión estuvo parado mientras arreglaban cosas, el par de muchachos seguian hablando, aunque para el Uruguayo parecian horas.
Luego de un rato, al medio de ambos, se sento una señora, la cual no parecia muy agradable.
La señora se habia puesto audifonos, por lo tanto el par de amigos, si amigos, siguio hablando y tenian muchas cosas en común, se reian a carcajadas y comparaban unas series de televisión con otras y mas se reian.- Es cierto, es cierto... tu te pareces a ese chico rubio, inteligente, de ojos grandes los cuales los lentes de daban un toque especial y su sonrisa era hermosa... - decia sin pensar el Brasileño -
A ese punto el Uruguayo no sabia si estaba hablando de el o un personaje de alguna serie, pero le gustaba que lo halagara y debia admitir que el Brasileño no era feo ni desagradable, por lo tanto eso era mucho mas reconfortante, la voz del brasileño era música para sus oidos, todo era hermoso hasta que empezo a imaginarse escenas un tanto "eróticas" con el Brasileño, ¿en qué mierda pensaba?, se repetia una y otra vez... pero las imágenes no terminaban, al contrario cada vez eran mas.
Tanto hasta que su respiración se volvia mas rápida y entrecortada, tambien sentia su cara roja, no de vergüenza, si no que de... ¿exitacion?, si, justamente eso.