Epílogo (Parte 2)

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Dos años después.

Se encontraba acostado mirando al techo entre las piernas del bicolor.

- ¿Entonces?, ¿te iras o no? - Preguntó Kaminari mientras alzaba su piernas y las bajaba.

- No... hay una sorpresa que tengo para el viejo - Denki suspiro.

- Me gusta tu papá, ¿me dejarías ser tu padrastro? - Shoto le pegó en la fuente.

- ¿Te gusta más mi viejo que yo? - Preguntó Shoto coqueto viendo cómo Kaminari se volteaba para acercarse a él.

- No... me gustas más tu - Shoto acerco sus labios a los de Kaminari pero este volteó la mirada levantándose.

- Siempre fiel, cariño - Susurro Kaminari tomándo su teléfono recibiendo una llamada.

- ¿Quién es? -

- Hanta - Contestó a Shoto y contestó su teléfono.

> Hola, mi amor. ¿Cómo estas? ¿Quieres que pase por ti a casa de Jirou para recoger los trajes? - Preguntó Hanta de la otra línea, Kaminari sonrió inconscientemente.

- Claro, solo que no estoy en casa de Jirou. Me quede a dormir con Todoroki - La llamada del otro quedó en silencio lo que Shoto aprovecho para agarrar a Kaminari de la cintura.

- Oh kami, que rico gemiste para mi anoche. - Kaminari se sonrrojo y se alejo para pegarle con una pantufla, Shoto se alejó carcajeandose.

- N-no le creas... pasa en mi en una hora - Y colgó sin esperar respuesta.

Salió de él cuarto de Shoto para encaminarse a la cocina notando que estaba Keigo platicando con Shoto, después de esa pequeña platica en la cabaña ellos empezaron a unirse más.

- ¿Te va a pegar? - Preguntó Shoto.

- Vete al demonio, me va a reclamar por tus mamadas - Respondió Kaminari.

- Pues no te dejes, no tienes por qué. - Habló ahora Keigo. Kaminari se sonrrojo para voltear la mirada.

- Es masoquista, le gusta que lo celen hasta romperle el culo ¿o no es asi? - Contestó Shoto dándole una mordída a una pan tostado.

Kaminari simplemente se subió para acomodar sus cosas junto un pan.

Después de unos minutos tocaron el timbre, Shoto abrió con una sonrisa, a Hanta se le borró la sonrisa que traía y se paró seriamente.

- ¿Dónde está Kaminari? - Preguntó molesto.

- Oh, déjame ver... creo que lo tengo en el bolsillo... ups, no tengo bolsillos - Sonrío burlón.

- Ya estoy cariño, nos vemos luego - Salió Kaminari casi corriendo dándole un beso a Hanta.

Los dos se encaminaron en silencio tomándose de las manos por las calles de Japón.

Kaminari quería aclarar lo sucedido pero tampoco quería regar el momento así que se calló.

Entraron a la tienda, Hanta habló con la empleada para que ella traviesas los trajes que había encargado.

¡¡Cambio en los UKES!! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora