Deudas | Kookv

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— Buenas tardes, que se le ofrece? — Preguntó Taehyung con una leve sonrisa en su rostro.

— ¿Tiene cigarros? — Preguntó la señora, como de 45 años que estaba parada frente a él.

— Claro, son $3.500 — Respondió el rubio, agarrando un paquete de cigarros y dejándolos encima de la barra.

La señora pagó y se fue, dejando al omega recostado sobre su brazo en aquella tienda de convivencia.

Taehyung había conseguido un trabajo de medio tiempo, pero tenía que quedarse hasta las tres de la mañana trabajando todos los días ya que la tienda estaba abierta las 24 horas.

El rubio todas las noches dejaba a su pequeño cachorro llamado Sunoo a cargo de su padre.

Taehyung seguía sin estar completamente confiado al dejar a su hijo con aquel hombre que nunca llegaría a llamar "esposo" ya que aún así un anillo los comprometiera, Namjoon seguía siendo un violador desconocido para el omega.

Ya eran las 1:30 de la madrugada, el rubio estaba jugando con su celular mientras se comía un ramen instantáneo, mientras jugaba le llegó una llamada de su jefe.

No se tardo ni dos segundos en contestar.

— ¿Hola? — Hablo Taehyung, esperando que su jefe le explicara por que lo había llamado tan de la nada.

— Señor Kim, hoy saldrá más temprano del trabajo porque anunciaron fuertes lluvias para dentro de una hora. — Respondió rápidamente el jefe antes de colgar el teléfono.

— ¿Salir más temprano? Bueno, mejor, así puedo descansar más — Hablo para si mismo, tirando a la basura el ramen que estaba comiendo mientras cerraba la tienda con llave y se dirigía a su departamento.

Cuando abrió la puerta de su departamento, notó como todas las luces estaban apagadas, algo raro ya que siempre que él llegaba de su trabajo las luces del salón estaban encendidas.
Siguió caminando, notando como en el salón habían distintos frascos de botellas como: cervezas, vodka, vino y soju.
El rubio estaba muy confundido pero simplemente ignoro esas botellas ya que sabía que él alfa que vivía con él solía tomar mucho.

Antes de ir directamente a su cuarto, fue a ver a su pequeña estrellita, así llamaba Taehyung a Sunoo ya que él alumbraba un poco su vida luego de estar en completa oscuridad.

Cuando abrió la puerta de su hijo, se esperaba verlo dormido en su cama pero lo vio en una esquina de la pieza, sollozando en la oscuridad con un pantalón y poleron mucho más grande a los de su talla.

— Sunoo, cariño, por que no estás dormido? — Hablo Taehyung, entrando lentamente a la habitación mientras intentaba acercarse al pequeño.

Justo en el momento que él rubio quiso tocar al menor, este se corrió, apartando la mano de su padre, dejando a Taehyung muy confundido por aquella reacción.

— ¿Sunoo? — Volvió a hablar Taehyung con completa calma para poder entender que era lo que él sucedía a su pequeño.

— A-Alejate. — Respondió el menor, sin poder mirar a su padre a los ojos.

— Amor.. ¿Que sucedió? no te haré daño. — Taehyung estaba intentando tranquilizar a su hijo, intentando averiguar que era lo que le pasaba.

Sunoo, no quería responder, solamente se atrevió a subir la mirada, dejando a la vista los notables golpes que habían en su rostro, dejando completamente impactado a Taehyung.

— Sunoo, quítate la ropa, ahora. — Ordenó el rubio mientras fruncía el ceño y comenzaba a soltar feromonas de furia mezcladas con preocupación, asustando al pequeño que se encontraba llorando.

Sunoo no tuvo más remedio que asentir y comenzar a desvestirse frente a su padre, dejando ver todos los moretones, cortes y quemaduras de cigarros por todo su pálido cuerpo.

El menor no quería levantar la mirada y enfrentar a su padre, pero en el momento que lo hizo se le partió el alma ver como su papá Taehyung lloraba en silencio, tapándose la boca y mirando cada parte de su cuerpo, sus golpes, quemaduras y cortes.

Ambos estaban en el suelo llorando, sin decir ni una sola palabra, Sunoo no sabía que hacer al ver como su papá lloraba, solo de limito a mirar al suelo, culpándose del llanto de Taehyung.

En cambio, el rubio estaba llorando de frustración y enojo, se culpaba de todo lo que le había sucedido a su pequeño, todo lo que tuvo que sufrir.

Pasaron 10 minutos donde Taehyung y Sunoo estaban llorando, hasta que el rubio se levantó y comenzó a hacer una mochila con la ropa de Sunoo.

Cuando termino de hacerla, tomo en brazos al menor y salió del departamento.

Taehyung no sabía a donde ir ni por que había reaccionado de tal manera, pero lo que si sabía era que haría lo que fuera por mantener a Namjoon alejado de él y de Sunoo.

• • •

Taehyung y Sunoo habían comenzado a vivir con la abuela del rubio, la cual los acogió en su pequeña casa en Busan.

El rubio no se había separado en ningún momento de su hijo, él simplemente no podía entender como una persona puede ser tan cruel como para maltratar así hasta a su propio hijo el cual tenía solo 4 años.

— Papi, mañana podemos salir a comprar ropa? — Preguntó Sunoo, modulando cada palabra ya que aún le costaba un poco hablar bien.

— Si, bebé, mañana te compraré todo lo que quieras. — Respondió Taehyung, dejándole un corto beso en la frente al menor antes de arroparlo y hacerlo dormir.

El omega no pudo dormir durante toda la noche después de huir de casa.