Los días siendo parte de la realeza eran realmente aburrido, siempre todo tan rígido y controlado por horarios.
Primero levantarse y alistarse para el día... esto resulta ser algo entretenido pues escoger el vestido que usará ese mismo día adornarse el cuerpo con joyas es algo que le agrada.
Luego, sus clases acerca de política, administración y muchos otros temas aburridos.
Después, debía pasar largas horas escuchando las quejas y todo eso relacionado con la prole. Sabía que su pueblo era importante per encargarse de todo eso era horrible.
Uno de sus pocos descansos era la hora de la merienda. Aquel momento era encantador, pues su fiel sirviente siempre tenía todo listo a la hora en punto, podía dejar de preocuparse y solo concentrarse en los ricos postres que este servía.
Cuando esta terminaba, sus labores de princesa volvían a empezar, si no eran lecciones, eran reuniones, papeleo y un largo etcétera de cosas.
Para tener 14 años era agotador y eso que aún no se consideraba a su misma la reina, solo era la princesa.
¿Sería peor cuando fuera la reina?
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EN LOS ZAPATOS DE...
FanfictionCada personaje tiene una rutina o una situación interesante que no suele ser remarcada o pasa de imprevisto. En esta actividad se mostrarán escritos de pequeñas cosas que hacen los personajes en un día normal de sus vidas.